Quince días después de las primeras protestas de profesionales sanitarios de esta legislatura por los recortes en la plantilla del hospital motivados por el descenso de los contratos en todas las categorías, CCOO, sindicato que empezó a promover las movilizaciones respaldado por el resto de centrales sindicales, afirma que la situación apenas ha variado y el descontento persiste. "Han estado contratando a cuentagotas y con contratos precarios, no como decían de una duración mínima de seis meses".

Como ejemplo, desde la sección sindical de CCOO en el hospital aseguran que la pasada semana se firmaron contratos sólo de dos días para cubrir la jornada de las elecciones generales. El viernes pasado se autorizaron otras seis contrataciones, pero hasta el 30 de noviembre, de auxiliar de Enfermería y dos de técnico de laboratorio, y también, según CCOO, se ha empezado a llamar a algunos médicos de familia. "En cualquier caso, son contratos de muy poco tiempo y se siguen sin cubrir las bajas por incapacidad transitoria o las vacaciones".

Aunque todas las categorías se ven afectadas, según pusieron de manifiesto los sindicatos en la concentración del pasado 31 de octubre, el colectivo de celadores es uno de los más perjudicados por la falta de cobertura de las bajas y vacaciones. Según CCOO, hay ya algunos servicios que por la tarde se están quedando sin estos profesionales, "y son los de puerta los que tienen que dar respuesta a aquellos servicios que no disponen de este personal. Además de la carga de trabajo lógicamente para estos compañeros, están las esperas de los pacientes que precisan de un celador". Afirma además que se están denunciando otras situaciones como la obligación de doblar a trabajadores que están de turno sin respetar la conciliación familiar.

En una jornada, en la que las protestas se trasladaron en el caso de la provincia, al hospital de Puerto Real por los mismos motivos, CCOO señaló que "seguimos reclamando todos aquellos puestos que están sin cubrir, pero la única respuesta que obtenemos es que los Servicios Centrales del SAS en Sevilla no lo autoriza".

Las críticas sindicales se extienden también a otras cuestiones como que a estas alturas del año, en vísperas de la llegada de la época de más alta frecuentación del hospital, estén aún cerradas 34 camas de la planta de Medicina Interna, por una obra que se tenía que haber realizado durante el verano y cuyo comienzo se retrasó a septiembre, aunque la planta estaba cerrada desde julio.

La explicación de la delegación territorial de Salud fue que el proceso de licitación había tenido que garantizar que todo se realizara conforme marca la normativa vigente y "cumpliendo los plazos establecidos en ella".