El detenido por el crimen de la mujer hallada en un pozo en Jerez pasa a disposición judicial este miércoles

El hombre detenido el pasado domingo, que ha confesado a la Policía que mató a una mujer de nacionalidad iraní que estaba desaparecida desde principios de julio, pasará a disposición judicial a lo largo de la jornada de este miércoles. Mientras tanto, se ultiman las diligencias policiales para tratar de esclarecer lo ocurrido en torno a este crimen.

El presunto autor de la muerte de Buran Forouzan, un hombre de entre 70 y 80 años, se encuentra en dependencias policiales a la espera de ser trasladado a los juzgados de la avenida Tomás García Figueras a lo largo de la jornada de este miércoles. En su declaración ante la policía, tras confesar que la había matado, señaló que había mantenido relaciones esporádicas con la víctima. Este ya contaba con antecedentes penales pues había cumplido una pena de prisión de 15 años por matar a otra persona años atrás.

La mujer llevaba desaparecida desde el pasado 6 de julio, día en el que se le vio salir del Albergue Municipal, un equipamiento dependiente de los servicios sociales del Ayuntamiento en el que había pernoctado de manera asidua durante los últimos meses. A principios de agosto, y ante la ausencia de noticias sobre su paradero, la Policía Nacional pidió colaboración ciudadana para tratar de localizarla ya que se temía por su vida.

De hecho, ya entonces se apuntó que se había habilitado un dispositivo de búsqueda que estaba centrado entre Jerez y el municipio sevillano de El Cuervo. Este medio pudo saber que el ahora detenido estaba siendo vigilado desde hacía días por los funcionarios policiales, un seguimiento que permitió localizar el lugar donde se acabó hallando el cadáver de la víctima.

El cuerpo fue encontrado en el fondo de un pozo de riego agrícola situado en un carril que rodea el Cortijo de Ducha, un paraje situado en el extremo norte del término municipal jerezano y muy próximo al enlace con la carretera de acceso al Aeropuerto. El cuerpo de la víctima se encontró a una gran profundidad desmembrado y tapado con escombros similares a los que había en el entorno del pozo.

Para recuperarlo, fue necesario el trabajo de unidades especialistas de la Policía Nacional en subsuelo. El cuerpo fue trasladado con posterioridad al Instituto de Medicina Legal de Cádiz para identificarlo y practicarle la correspondiente autopsia que contribuyera a esclarecer lo ocurrido.

Tras la detención del único implicado en este crimen, la Policía Nacional procedió en la jornada del lunes al registro de una vivienda donde reside en la barriada de Picadueña Baja. En la inspección los agentes encontraron un hacha que se cree que pudo ser la herramienta utilizada para matar a la víctima. La investigación está corriendo a cargo de funcionarios adscritos a la Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) y de la policía judicial de la Comisaría de Jerez.