Jerez marcó un hito histórico en agosto con la mayor salida de parados en este mes, nada menos que un millar de personas con los que se dispararon por encima de 4.000 los desempleados que han logrado abandonar las listas del paro en el conjunto del último año. Tras los datos publicados por el Ministerio de Empleo después de año y medio de pandemia afloran signos de recuperación, que también pueden observarse, aunque en menor medida, en la evolución de los contratos.

El municipio jerezano salda agosto con 8.677 altas laborales, y aunque la diferencia con el mes anterior es mínima pues no llegan a superar en una treintena los contratos de julio, en el acumulado del último año arroja un incremento del 16,34%, que se traduce en unas 1.200 contrataciones más que las registradas en agosto de 2019.

En esto de los contratos por municipios que no son capitales de provincia, cabe recordar, hay que huir de las afirmaciones categóricas por aquello de computarse únicamente los que están en vigor a último día de mes. Pero la estadística acaba por ajustarse en su repetición mensual para corregir, hasta cierto punto, la posible desviación del resultado, que en el caso de los contratos de agosto, al igual que en el paro, refleja la paulatina adaptación del mercado laboral a la nueva realidad social, en plena desescalada de las restricciones motivadas por la crisis sanitaria.

La entrada del verano deparó en junio el máximo registro de las contrataciones desde el inicio de la pandemia con algo más de 9.300 altas. La vuelta de la actividad turística con la reapertura de establecimientos hoteleros y la ampliación de horarios de la actividad comercial tras la supresión del toque de queda animaron la contratación, que en los dos últimos meses, julio y agosto, se mantuvo por encima de las 8.600 altas.

Los contratos superan en 1.200 a los de agosto del año pasado y bajan en 584 respecto al mismo mes de 2019

Las cifras actuales siguen estando por debajo de los registros de antes de la pandemia –en junio y julio de 2019 se rebasaron los 10.000 contratos, mientras que en agosto de ese mismo año se superaron las 9.200–, pero los dos últimos meses se mueven en torno al millar de altas por encima de las de 2020, el primer año de crisis, mientras que junio, que abre la temporada estival, lo supera en más de tres mil contratos.

La relajación de las restricciones aún con la incidencia disparada en agosto por la variante delta y su rápida propagación –nada que ver con lo ocurrido en la primera semana de septiembre en la que la tasa de contagios por cada 100.000 habitantes se ha desplomado para bajar ya de los cien casos– contribuyó a la reactivación económica del sector servicios, principal motor de la economía jerezana con 5.443 de los 8.677 contratos firmados en Jerez, que vienen a ser el 64% del total. En términos interanuales, los servicios suman en torno a un millar más de altas que en agosto del año pasado tras un incremento del 24%.

La agricultura sigue teniendo su peso específico en la economía jerezana, a la que aporta algo más de dos mil contrataciones en agosto y 118 más (+6,13%) que las registradas por las mismas fechas un año antes.

Pero lo que más llama la atención en la comparativa del último año es el fuerte repunte experimentado por la industria, que roza los 600 contratos, un centenar justo más que en agosto de 2019, tras una subida del 20%.

Julio y agosto calcan sus resultados tras las 9.300 altas de julio, el mejor mes del verano

Posiblemente espoleada por la demanda del sector servicios, la industria desbanca en el último mes a la construcción como tercer sector con mayor número de contratos, aunque con apenas tres altas de diferencia. El ladrillo se queda ligeramente por debajo de los 600 y es el único sector que retrocede respecto al año anterior, en concreto un -2,77%.

La crisis sanitaria apenas ha alterado el orden de las actividades económicas que generan más empleo en la ciudad, listado que encabeza en agosto la agricultura con sus algo más de dos mil altas, seguida de los 1.658 registrados en la hostelería y los 1.028 de las actividades administrativas y auxiliares.

Son las únicas actividades que superan en el último mes el millar de altas en el municipio, donde las ocupaciones más demandadas por las empresas, y con diferencia, son las elementales, con 3.653. Los trabajadores de los servicios de restauración, personales, protección y vendedores generan 2.182 demandas de empleo y, a mucha distancia, le siguen los artesanos y trabajadores cualificados de las industrias manufactureras y la construcción (695(, los operadores de instalaciones y maquinaria, así como montadores (675) y los empleados contables, administrativos y otros empleados de oficina (645).

El desglose por sexos tampoco depara grandes sorpresas, ya que los hombres tienen mayor facilidad para ser contratados, pues acaparan 5.202 altas frente a las 3.475 que llevan la firma de mujeres. Los contratos entre los primeros crecen un 15,3% en el último año, cerca de tres puntos menos que los que benefician a las mujeres, cuyo incremento en los últimos doce meses roza el 18%.