El 'nuevo' San Benito

Los parados del polígono 'construyen' junto a los vecinos una barriada más cómoda y habitable para desterrar su mala imagen · Del antiguo 'supermercado de la droga' a un lugar con gente tranquila y normal

Representantes vecinales y políticos posan, días atrás, junto a los desempleados voluntarios en la plaza de 'Pepa la del polígono'.
J.p.s./ Jerez

08 de diciembre 2009 - 01:00

"¿Sabe usted por qué llaman a esa calle la segunda calle? Porque se acercan a preguntar que dónde podemos comprar y siempre decimos lo mismo: la primera no, la segunda calle a la derecha. La calle del corazón del problema. La segunda calle es la calle Centuria, el lugar donde si ustedes pasan, saldrán en pelotas, el lugar por donde sólo pasaría un alemán despistado que no entiende de la mortadela".

Esta conversación se mantuvo en agosto de 2002. Han pasado, por tanto, siete años. En San Benito, en 'las casitas bajas', ya no se pregunta por la 'segunda calle'. Del 'super' de la droga a mucho menos. Hace ahora siete años, Pacheco quiso quitar de la vista y el callejero las 300 viviendas. Las derribaría, crearía un enorme espacio y levantaría pisos dignos para realojar al vecindario. El Ayuntamiento hablaba de una "alarma social importante" que había crecido a raíz de las segundas ventas. Las casas las ocuparon familias que no eran primeros adjudicatarios a través de contratos privados. Hubo antes un acoso a los vecinos: Para los traficantes, las esquinas son los mejores puntos de venta. Tras la apariencia de una pequeña vivienda transitoria existía un mundo que algunos veces describían como 'palacios interiores'. Las casas que estaban en poder de los clanes de la droga tenían un acceso casi inexpugnable para la Policía. A las rejas y puertas de hierro con cerraduras especialmente preparadas para los asaltos, les seguían dobles pasillos y conexiones entre las casas. En muchas de ellas, tras las obras realizadas por lo nuevos 'propietarios', se enseñoreaba el mármol y había un importante número de perros de razas especialmente peligrosas. Y nada de esto es leyenda.

Hoy día, la vida continúa en las más del millar de viviendas de San Benito. La Junta se emplea ahora en la reforma de más de un centenar de las casitas. San Benito no es lo que era: sigue siendo un vecindario tranquilo y de gente normal que hace una vida rutinaria. Paqui Pazo lo conoció bien. Ella es otra de las 'valientes del barrio'. Mujer activa y vehemente, desde hace un año, preside la asociación vecinal 'Pedro Palma'. Hace algunas semanas, esta valiente se encargó de calmar los ánimos de los parados de San Benito que reivindicaban participar en las obras de reforma de sus propias casas. Paqui no logró colocarlos, pero sí consiguió de ellos un compromiso: Trabajarían para dignificar la barriada, para quitarle ese sambenito a San Benito. Este puñado de hombres que, día a día, hacen del lugar una barriada más cómoda y habitable son los vecinos adscritos al plan de voluntariado de la asociación. Son los encargados de dignificar el barrio.

Paqui no es del polígono. Vino hasta aquí hace 36 años, cuando los planes de las UVA (Unidades de Viviendas de Absorción) permitieron dar techo a un grandísimo número de familias que, a finales de los sesenta o principios de los setenta, vivían en condiciones precarias. El Instituto Nacional de la Vivienda levantó en la zona estas 300 viviendas, cuya titularidad pasó por transferencias de competencias (antiguamente eran gestionadas por la Junta Fomento del Hogar) a manos del Gobierno andaluz. Los vecinos han ido pagando unas rentas simbólicas y, desde hace años, un proceso de regularización que permite al vecino, tras un 'filtro', acceder a la propiedad. Cuando alcanzó los 18 años, Paqui, sus cuatro hermanos y sus padres cambiaron la modestísima casa de Torresoto por un espacioso hogar en la UVA. Su padre José Pazo Holgado sacó adelante a la familia; trabajaba en el antiguo Instituto de Colonización, en la plaza Esteve. "Era como un artista de cine. Con una gran bondad, respetuoso... Esos valores los trasmitió a sus hijos". La vida de Paqui transcurrió en el polígono. Luego se casó. Abrió después una tienda de confección. Hace cuatro años entró en la asociación vecinal. Tuvo tres hijos, pero ninguno de sus otros familiares han abandonado San Benito. Ahora es la presidenta vecinal, en un barrio en el que todos se ayudan y que cuenta con un importante número de asociaciones: Petri Lahera, por ejemplo, preside el 'Colectivo de Mujeres Antonio Jaén', una asociación lúdica que cuenta con talleres de pintura y costura, que se erigió en memoria de aquél maestro de escuela que enseñó a leer y escribir a buena parte del barrio y que murió a temprana edad. También está 'Encuentros', donde convergen el trabajo de Cáritas de El Pilar y voluntarios, o 'Nuevas ilusiones', el colectivo que levantó Pepa. Paqui se lo propuso desde su primer día como presidenta: Cambiar la imagen del barrio. "Porque todos nosotros somos parte de San Benito y luchamos por nuestras familias, nuestras casas y nuestro entorno. Aquí hay muy buenos padres de familias que, pese a tener un oficio modesto, han logrado sacar a sus hijos adelante".

A tiro de piedra de la sede vecinal, en la plaza Josefa García Barbadilla, 'Pepa del polígono', aquella mujer buena y valiente que plantó cara al traficante y que luchó por un barrio más digno, está la pista polideportiva. De un lado a otro anda José María Loreto, portavoz de los desempleados. El pasado martes, él y sus compañeros se remangaron y comenzaron con las faenas de adecentamiento del entorno. El Ayuntamiento se ha volcado en el proyecto: Ha enviado a San Benito material de jardinería y se ha diseñado el nuevo trazado en la pista polideportiva, redes de protección y aledaños para emprender una futura actuación. Y hay perspectivas muy serias de que José María y su gente cree la futura asociación juvenil deportiva de fútbol-sala de la barriada, para lo cual contarán con el asesoramiento técnico de la delegación de Deportes. Hombre atento y conversador, José María Loreto representó a sus vecinos desempleados reclamando un jornal cuando las máquinas y personal foráneo entraron hace semanas en la barriada para reformar sus propias casas.

Como Paqui, conoce al dedillo el polígono; vivió en la barriada desde sus inicios, cuando aquellas familias necesitadas llegaron desde La Plata y otros barrios deprimidos para mejorar su situación y salir adelante. Fueron los tiempos de la UVA. Tiene dos hijos y lleva año y medio en paro. La construcción le dejó en el camino y le obsesiona esta inquietud: "¿Qué haré cuando pasen los meses y me quede sin subsidio?" Entretanto, José María dedica su esfuerzo al barrio. "Voy a diario al 'sindicato', me preocupo por buscar trabajo, yendo de obra a obra, de aquí para allá... Pero dispongo de tiempo para dedicárselo al barrio. Lo queremos cambiar. Físicamente, y también su imagen: desterrar, en fin, ese 'sambenito' que ha perseguido siempre a San Benito".

Óscar tiene 30 años y dos hijos. Tiene pareja de hecho. Como al resto, la caída del 'ladrillo' les condujo a esta situación. Y, al fondo, un drama. El drama es idéntico o muy parecido cuando se habla con Juan o David. Las conversaciones entre ellos se confunden: "Estamos aquí para mejorar el barrio". "Que nos quiten las comillas". O lo que dice David: "La gente habla mucho y mal de las casitas bajas, pero la realidad de ahora no es así. Queremos un barrio distinto; la propia pista deportiva juvenil es buena para los más pequeños. Pensamos en nuestros hijos, 'sacarles' de la calle".

En la plaza de Josefa García Barbadilla, la 'Pepa del polígono', la vida sigue. Cada día, se acercan vecinos, jóvenes y jubilados, viendo y mirando. Hoy día, en San Benito no hay lunes al sol. Ni martes, ni miércoles... Loreto y su cuadrilla siguen con su trabajo. Guardan esperanzas de que el Servicio Andaluz de Empleo les conceda algún problema de formación. Entretanto, Paqui sigue en la sede de 'Pedro Palma', 'repartiendo' promesas y gestiones. Junto a ella está Petri, la que siempre vio en la Pepa a su propia madre. Bueno... ¿Y Pepa?, ¿qué diría al conocer el 'nuevo' San Benito?

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último