La plantilla de Holcim se pone en manos de Empleo, que mediará en el conflicto

Unos setenta empleados continuaron las protestas ante la fábrica y el Ayuntamiento

Protesta de los empleados de Holcim, ayer a las puertas de la fábrica.
Redacción/ Jerez

18 de julio 2009 - 01:00

El comité representativo de los trabajadores de la cementera Holcim, antes Cementos Alba, prosiguió ayer la cadena de protestas después de que, a principios de este mes, la compañía presentara un Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) de seis meses que afecta a 35 trabajadores del cerca de centenar de operarios que emplea la planta en Jerez.

Ayer, en concreto, unos setenta trabajadores, entre los que se contaban empleados de las fábricas de Carbonera, Gador, Lorca y Yeles, volvieron a protagonizar una concentración a las puertas de la fábrica, en la carretera a Medina. Posteriormente, y durante una hora, los trabajadores llevaron la concentración a las puertas del Consistorio jerezano, que depusieron al no ser recibidos por la alcaldesa Pilar Sánchez. Según explicó a este periódico Miguel Díaz, presidente del comité de empresa, los trabajadores regresaron posteriormente a las inmediaciones de la fábrica, donde se mantuvieron concentrados entre las 12 y 14 horas. En el curso de una asamblea informativa, el comité dio cuenta a la plantilla de las conversaciones mantenidas con el delegado provincial de Empleo de la Junta, Juan Bouza, que se ha comprometido a mediar en el conflicto, tal como aseguró Miguel Díaz, quien precisó que los trabajadores harán un compás de espera a las gestiones que realice ante la empresa. En el caso de que fracase este intento, los comités de las distintas plantas proyectan acudir a Sevilla para ser recibidos por el consejero de Empleo, el jerezano Antonio Fernández y, en el supuesto de no fructificar este encuentro, desplazarse hasta Madrid para mantener una entrevista con el titular del Ministerio de Trabajo, Celestino Corbacho.

Precisamente, el titular andaluz de Empleo transmitió ayer un mensaje de tranquilidad a los trabajadores de la cementera, a los que recordó que el expediente de la fábrica de Jerez, a diferencia del que afectó a la planta de la empresa en Torredonjimeno, "es una suspensión de contratos para ajuste de la actividad del cemento y no es en ningún caso un cierre de empresa".

Fernández señaló que, "es obvio que los EREs suspensivos tienen carácter de prevención, de estabilidad. Son expedientes garantistas del empleo de futuro y, por tanto, nosotros lo miramos, de existir causas, con un criterio positivo y así nos gustaría que los trabajadores lo consideraran y estamos seguros que en Holcim también habrá acuerdo".

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