Los trabajadores reconocen que "ahora cobramos todos los meses y nos escuchan"

Antes de darse a conocer la querella de Urbanos Amarillos a la alcaldesa, los trabajadores del servicio de transporte urbano reconocían que "está claro que todo se puede mejorar, pero estamos muy contentos" con la gestión municipal. El presidente del comité, José María Romero, apuntó que "una de las reclamaciones principales de la plantilla era cobrar cada mes y ahora lo hacemos. Hay más vehículos, que dan mucho trabajo, la plantilla se mantiene y el servicio va recuperando viajeros..., así que estamos contentos".

El presidente declaró que los últimos datos de número de usuarios reflejaban que "el servicio ha mejorado y que estamos recuperando la confianza del público". Este giro en el servicio viene de la mano del secuestro del Ayuntamiento hace dos años, una intervención que ha llevado a que "la situación ha cambiado muchísimo para nosotros y para la ciudad. Y creo que esto se debe, en gran parte, a que los trabajadores siempre han confiado en el transporte urbano y nos hayan hecho partícipes de las decisiones. Pasamos de una relación inexistente con Urbanos Amarillos a que escuchen nuestras opiniones para los itinerarios, tarifas, horarios... El que nos hayan escuchado ha sido la clave de este éxito".

Romero añadió que "hace tres años nadie se lo habría imaginado: de estar en la calle pidiendo nuestras nóminas a tener nuestros salarios normalizados. Ahora mismo, con los medios que tenemos, se ha conseguido algo máximo. Era necesaria la implicación de todo el mundo, sin eso, no se hubiera salido adelante".

El mismo mensaje de optimismo lo lanzó el delegado de Movilidad, Agustín Muñoz, quien resaltó que el actual servicio "funciona bien desde todas las perspectivas". "Ha vuelto la paz social, la relación con los trabajadores es muy buena y no ha habido ni un mes desde el secuestro en el que haya bajado el número de usuarios", indicó Muñoz.

En esta nueva etapa del servicio juega un papel fundamental la Mesa de Movilidad, un "hito" en la ciudad en el que han participado "todos los sectores, llegando al consenso en la toma de decisiones". El nuevo sistema de tarifas es uno de los puntos que sigue trabajando la Mesa para ultimar los detalles de cara a su implantación "para primero de 2015". "Los nuevos títulos pretenden no sólo cubrir nuevas necesidades, sino hacer más atractivo el servicio y fidelizar a los usuarios. Estas tarifas tienen que ser reconocidas como una tasa y estamos trabajando para que sea cuanto antes", informó Muñoz.