Alberto Puig, mánager general del equipo Honda Repsol, ha analizado todo lo que dio de sí el GP de Portugal celebrado en el circuito del Algarve en Portimao, donde Marc Márquez sólo pudo ser sexto y Pol Espargaró decimoséptimo.

Con la pista complicada por la lluvia durante los entrenamientos y la carrera en seco, Puig reconoce que "no fuimos capaces de conseguir la puesta a punto perfecta y probablemente necesitábamos más tiempo para entender nuestra moto en esta pista". Pese a esto, añadía que "no es una excusa porque los otros pilotos y equipos fueron rápidos con la misma cantidad de tiempo y en las mismas condiciones. Tenemos que seguir trabajando y analizando las posibilidades de las que disponemos, ahora ya pensando en Jerez".

Marc Márquez es undécimo en el Mundial -se perdió las carreras de Mandalika y Argentina- y repitió sexto puesto que ya obtuviera en Las Américas. El ocho veces campeón está a 38 puntos de Quartararo, nuevo líder. Puig extra lo positivo y también lo negativo de Portimao: "Lo positivo es que estamos dos puntos más cerca del liderato del campeonato de pilotos, pero la realidad es que nuestro rendimiento no fue tan bueno como esperábamos aquí. Estar a 16 segundos del ganador no es el objetivo. Esto no es bueno para nosotros y tenemos que mejorarlo".

Y desde ya, Honda Repsol piensa en el GP de España de este fin de semana en Jerez: "Vamos a un circuito donde nuestros pilotos han ido tradicionalmente rápidos. Tenemos que esperar y ver cuál es la situación, aspirar a una mejor carrera y tratar de entender qué sucede si no estamos ahí con el grupo en la carrera. En Portimao ha quedado demostrado que tenemos que mejorar más nuestra moto".