Mujeres obispos

Inglaterra tan poco apreciada por los “españoles” fue la encarnación del mal, en la tristemente recordada dictadura de Franco. Desde la escuela Isabel la Católica nos llevaron en formación a la calle Ancha, donde habitaba D. Guido, representante de Reino Unido en Jerez. “¡Gibraltar español”.

La Iglesia de Inglaterra es la oficial de Gran Bretaña y es el rey o la reina cabeza visible entre los creyentes, Inglaterra tiene al arzobispo de Cantebury como líder espiritual de los creyentes. Hasta ahora un arzobispo varón, que tuvo que dimitir por su posición permisiva ante los abusos sexuales en niños y niñas. Se repite la historia como en el mundo católico.

El actual rey Carlos III aprobó el nombramiento de la obispa Sarah Mullally . Es la primera vez en la historia inglesa que una mujer es nombrada Arzobispo de Canterbury en los 500 años de esa escisión en la iglesia de Roma. Pastorea sobre 20 millones de bautizados. La arzobispa se presenta como feminista. Un avance se produjo en el año 1994 en la ordenación de mujeres, y obispas en 2018. El Papa Francisco la invitó para que explicara la experiencia, el camino de los anglicanos en la ordenación de mujeres. Algunos pasos va dando la Iglesia Católica, muy lentamente, en el papel de la mujer, mas allá de la decoración y la limpieza de los locales sagrados. La católica es una iglesia de ministros masculinos, y sin embargo la asistencia a la iglesia es mayoría femenina.

Otra obispa valiente es la titular en la Catedral Nacional de Washington, Mariann Edgar Budde ofreció una homilía en el servicio religioso después de la toma de posesión como presidente de los Estados Unidos de Donald Trump. Acompañaban los representantes de los diferentes partidos americanos. A Trump, presente, le sentó muy mal, y después del servicio religioso Trump se refirió a la obispa como una “supuesta obispa” y una “odiador de Trump de línea dura de izquierda radical…” No le sentó bien la crítica.