El presidente Biden no sólo hace regalos a Pedro Sánchez. Citarlo en la Casa Blanca el primer día de la campaña le lucirá al primer ministro español. Pero el anuncio del americano de que se presenta a la reelección, le pone una alfombra a la sexta candidatura a la Alcaldía de Málaga de Francisco de la Torre, tras 23 años de desempeño. Hay quienes dicen que los 80 de Paco son muchos, pero hace días en el 30 aniversario del parque tecnológico Málaga TechPark levantó a los asistentes de sus asientos con un discurso sin papeles. El día de su cumpleaños, el 21 de diciembre, sus concejales le adaptaron la canción de La vuelta al mundo de Willy Fog: "son, 80 años son, 80 nada más…".

Se da la curiosidad de que Biden y De la Torre son del mismo año y el alcalde malagueño es más joven por un mes. Biden nació el 20 de noviembre de 1942. De la Torre está mejor de forma física y metal, y además sólo tiene que gobernar Málaga entre el 23 y el 27, mientras el otro debe ocuparse del mundo mundial entre el 25 y el 29. El malagueño tiene ventaja clara. Si Málaga consigue que la designen sede de la Expo Internacional de 2027, incluso De la Torre tendría cuerda para inaugurarla.

El concurso en las elecciones de personas mayores tiene su público. La Confederación Española de Organizaciones de Mayores, se felicitó en el día de la toma de posesión de Biden. En el equipo de Joe repiten que experiencia y sabiduría son un activo. Y los republicanos no están seguros de atacarle por ese flanco, por tantas personas de edad que votan y pueden sentirse aludidas. Y sobre todo, porque si Biden tendrá casi 82 cuando se vote, su previsible adversario Donald Trump tendrá 78. Según un estudio del centro Pew Research la mayor parte de los líderes globales están en los 50 o 60. Gabriel Boric tiene 37, Zelensky 45, Trudeau 51, Xi Jinping 69, Putin 70 y el camerunés Paul Biya 90. La edad promedio es 62. Y las mujeres líderes son más jóvenes que los hombres: la finlandesa Sanna Marin juró su cargo a los 34.

Estamos en una regresión de la efebocracia. El presidente de Mapfre y el director de la Deusto Business School publicaron hace unos años un libro con el título de la La Revolución de las canas, The Silver Revolution. Allí advertían que los cambios tecnológicos impulsarán una profunda transformación en la salud, las finanzas, la vivienda, el empleo, la educación y las ciudades en las que vivimos a medida que nos adaptemos a la longevidad. De momento, Biden y De la Torre marcan tendencia.