HACE unos días, en medio de una conversación, salió una pregunta que llevo escuchando muchos años. ¿Porqué una ciudad como Jerez, la quinta de Andalucía, no tiene un equipo en Primera División? En mi opinión esto sucede porque no somos capaces de unirnos y trabajar por un proyecto que sobrepase cualquier interés personal.

Aquí nos gusta mucho más los Reinos de Taifas. En general, el jerezano prefiere pavonearse como presidente de un club, que trabajar como un simple socio por un club serio y un proyecto coherente. Miras el fútbol y sacas el listado de clubes que hay en la ciudad, por supuesto todos exigen un campo municipal en perfecto estado de revista. Miras al baloncesto y tres cuarto de lo mismo.

Pero esto que les cuento del deporte jerezano impregna y es transversal a la mayoría de los ámbitos de nuestra sociedad. Te cuentan que algunas hermandades históricas se están quedando sin hermanos, pero en cada barriada aparece una nueva cofradía, primero de chavales y al tiempo pidiendo salir en Carrera Oficial. Al final, son más y más hermandades para la misma gente.

Donde se nota más este amor por el yo, mi, me conmigo y unos cuantos aduladores y amiguetes es en la política llamada progresista de nuestra ciudad. Si no fuera porque la Vida de Brian es del 79, lo del Frente Judaico de Liberación y demás parecería copiado del panorama político de la izquierda jerezana. Cada cual por su lado, incapaz de ponerse de acuerdo en un proyecto común. Mientras tanto, las dos empresas de la política en España, PSOE y PP, tranquilos y felices.

¿Veremos un equipo jerezano en la élite del deporte español? A corto plazo no veo solución al respecto. Las diferencias entre los dirigentes y aficiones de los diferentes clubes a fecha de hoy son insalvables, hasta el punto que gente que hace una década compartía el mismo escudo se ha llegado a enfrentar en una grada representando cada cual a su Taifa correspondiente.

A las representantes de las empresas políticas, Sánchez y Pelayo, teniendo muy fresco en la memoria lo que el fútbol le hizo a Pacheco, seguirán apostando por el actual sistema, alimentando y apoyando el sistema actual. Mejor que se peleen entre ellos a que se unan y les muevan el sillón.

Eso sí, nos creemos la capital del mundo, ese sentimiento que tanto han pregonado nuestros políticos, quizás ante la falta de una simple capitalidad provincial. Así nos va. ¡Viva Jerez!