Jerez íntimo

Marco Antonio Velo

marcoantoniovelo@gmail.com

Magisterio con acento andaluz

Representantes de las instituciones coorganizadoras de la Jornada Técnica ‘El español de Cádiz, de ayer a hoy’.

Representantes de las instituciones coorganizadoras de la Jornada Técnica ‘El español de Cádiz, de ayer a hoy’.

Un sol de justicia acampa a sus anchas -como un yacimiento de fuego benigno sin plumas de garza- sobre la ciudad trimilenaria de Cádiz. Subsiste como una ensenada oculta que dicta apotegmas sobre la República de las Letras. Prima inter omnes con fijeza de piedra ostionera. Un aura de exotismo se espesa en la mañana tempranera que reescribe metáforas sobre el frontispicio de esta Cuna de la Libertad donde aún resuenan -como un metrónomo atemporal- las bombas que in illo tempore tiraron los fanfarronees. Calma chicha de confín a confín. Ando presuroso hacia la Casa de Iberoamérica -antigua Cárcel Real-. Allí la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía y el Grupo Joly -con la colaboración de Unicaja Banco- organizan una Jornada Técnica que haría las delicias del propio Fernando Lázaro Carreter. Bajo el epígrafe común de ‘El español de Cádiz, de ayer a hoy’, pronto la especulación del silencio -aquella mudez tan parapetada en ‘Los pasos perdidos’ de Alejo Carpentier- se troca en palabra. En Gramática. En tránsito verbal. En distribución de los segmentos flexivos, derivación nominal, grupos adverbiales, complementos predicativos. Análisis. Literatura que también es “señorita del mar, novia del aire”, tal así describiera José María Pemán a esta localidad capaz de guardar el secreto del noviazgo entre Catalina y Sebastián, dos castillos de piel de aguaje que aún pelan la pava.

Alguien sonríe cortésmente, alguien calla su inminencia de apuntes a borbotones, alguien contiene una carcajada en diapasón agudo. Enseguida comenzamos a tomar asiento. El marco es idílico. El oxígeno sabe a menta. Esta Jornada Técnica se reconoce un tanto genovesa. El programa de intervinientes, excepcional; las temáticas elegidas no brotan de ninguna chistera con escarapela: ahora la topografía intelectual gravita en la mente de todo el público concurrente. Día 22 del corriente mes de marzo. El conocimiento de los ponentes chorrea auctoritas. Aquí -ipso facto- acontecerá la literalidad del título del celebérrimo libro de Sonia Laredo: ‘Y entonces surgió algo maravilloso’. La gimnasia mental es acrobacia sin acupunturas. Principia la salivación del saber incluso en el sentido académico del término. Recuerdo de sopetón los ejercicios espirituales de Ramón María del Valle-Inclán: “Los idiomas son hijos del arado. De los surcos de la siembra vuelan las palabras con gracia de amanecida, como vuelan las alondras”.

Y es que, como comentara Tomás Valiente -del Grupo Joly- en sus palabras de introito y salutación: “La lengua no es un fósil, es una construcción en continuo cambio”. Así quedó demostrado en las sucesivas intervenciones de las voces autorizadas que completaron una Jornada Técnica “absolutamente prodigiosa”, como talmente fue definida por un reputado profesor durante el cóctel de clausura. El programa redondeó enfoques de actualísima vigencia: “Las empresas andaluzas en un mundo multilingüe: el español en convivencia con otras lenguas en el ámbito comercial” -a cargo de la profesora Ana Medina Reguera-, “Eduardo Benot, eximio gramático gaditano” -dictada por el catedrático y académico José Luis Girón Alconchel-, “Nombrando la realidad marina: creatividad, riqueza y contacto de lenguas en el mar de Cádiz” -según la profesora de Lengua Española Mercedes de la Torre García-, mesa redonda “Andalucía en su acento: medios, empresas y calle” -coordinada por la filóloga Lola Pons Rodríguez- y “Bahía de la Gracia. Cádiz en el imaginario poético” -por la doctora en Filología Hispánica Ana Sofía Pérez-Bustamante-. Amenidad, aprendizaje, categoría expositiva, nivel elevado a la enésima potencia…

Santiago Muñoz, director de la Real Academia Española, ha subrayado estos días que “Cádiz es inventora de palabras y tiene mucho que aportar”. Inventora de palabras como el genuino personaje interpretado por Camilo José Cela en su cameo actoral de la versión cinematográfica de ‘La colmena’. La Jornada Técnica coorganizada por la Junta de Andalucía y el Grupo Joly supuso un deslumbrante tributo a la cultura universal partiendo de la convergencia expansiva de lo local. Siempre como la escritura de luz de ‘El azar y viceversa’ de Felipe Benítez Reyes. Como la prosa intachable y envolvente de Fernando Quiñones. Como la profundidad poética de Alberti. Siempre, sí, con acento andaluz.

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