CATAVINO DE PAPEL

Manuel Ríos Ruiz

Petrarca nació y murió en julio

20 de julio 2012 - 01:00

HOY se cumplen setecientos ocho años del nacimiento, en Arezzo (Italia), de Francesco Petrarca, el excelso poeta y primer humanista de la historia, según sus más penetrantes estudiosos. Nació, pues, el veinte de julio de 1304. Y murió, en Arquá, el 19 de julio de 1374, a los setenta años de edad, donde le encontraron muerto sobre el libro que leía. En este mes de julio nos complace dedicar este espacio a su figura y obra. Hay que empezar reseñando que su poesía dio lugar a una corriente literaria en la que encontramos a los clásicos españoles Garcilaso de la Vega, Luis de Góngora, Lope de Vega y Francisco de Quevedo, como los más significativos.

Vivió en distintas localidades europeas, entre ellas Florencia, Pisa, Marsella, Aviñon, Provenza, Carpentras, Momtpellier y Bolonia, por circunstancias familiares y por el desarrollo de sus estudios, Regresó después a Provenza, donde hizo los votos eclesiásticos menores. Y en Provenza conoció a Laura de Naves, casada con un antepasado del marqués de Sade, una mujer que fue la inspiradora de sus versos, recogidos en su "Cancionero". He aquí uno de sus sonetos, el titulado: "En presencia de Laura": "El conservarte pura de mentira/ y haberte siempre cuanto pudo honrado/ ¡qué mal, ingrata lengua, me has pagado,/ causándome tal vez vergüenza e ira!/ En faz de Laura tu valor expira/ para pedir merced, y o te has callado,/ o imperfectas palabras balbuceando,/ como el hombre que sueña o que delira./ ¡Lágrimas tristes que la noche entera/ fieles me acompañáis! ¿Por qué delante/ de mi Laura no puedo desparciros?/ ¡Y vosotros, oh férvidos suspiros,/ también enmudecéis de tal manera/ que solo habla mi pálido semblante!"

La vida de Petrarca es toda una odisea en todos sus aspectos, desde el amoroso a su ensimismada tarea de conseguir la unión de Italia, sus escritos ensayísticos, su labor bibliográfica, su exaltación de Vitrubio o su última obra, "Los triunfos", dedicada a glosar la elevación del alma humana hacia Dios. Mas sobre todo, su inmortalidad se debe a su "Cancionero", con más de trecientos sonetos y canciones, sextinas, baladas y madrigales, para contar su pasión por Laura, desde sus estados emocionales y espirituales, hasta después de la muerte de su musa. Leopardi escribió al respecto: "La gran diferencia entre Petrarca y los demás poetas amorosos, consiste en que él vierte su amor y los demás lo anatomizan, él le hace hablar mientras los demás hablan de él".

Nos ha complacido recordar y exaltar hoy, día veinte de julio, a Francesco Petrarca, cuando se cumplen setecientos ocho años de su nacimiento, cuando su "Cancionero" sigue teniendo vigencia y su nombre en el devenir de la poesía brilla y rebrilla para siempre.

stats