Captura de pantalla del incidente de ayer entre Rossi y Marc Márquez..

Captura de pantalla del incidente de ayer entre Rossi y Marc Márquez..

EL Mundial de Motociclismo recibió ayer una 'dura patada', allí donde más le duele a la afición que lo respalda. Dos de sus grandes estrellas ofrecieron un lamentable espectáculo en Malasia, una imagen impropia del deporte. Márquez acabó por los suelos, recriminando la "agresión" con puntapié de Rossi que, lejos de admitirlo, reprochó "juego sucio" del español.

Las imágenes del controvertido incidente, dieron de inmediato miles de vueltas al mundo. Las cámaras pudieron captarlo desde todos los ángulos, con secuencias laterales, otras desde el helicóptero, e incluso desde una cámara giroscópica, instalada en la moto del peor parado. En ellas, observamos el contacto cuerpo a cuerpo de Marc y Valentino, gestado en una reyerta con quince adelantamientos en sólo siete angustiosas vueltas, en las que luchaban por el tercer puesto. Parecía que la carrera sólo tuviese a ambos como protagonistas, cuando debía ser un combate por el título entre el nueve veces campeón y su compañero Jorge Lorenzo.

Por momentos, dio la impresión de que Rossi dudase entre seguir en carrera, o pararse a discutir con Márquez. Le estaba amargando el día y optó por cerrarle la trayectoria en una curva de derechas. El italiano miró fijamente a su oponente y, poco a poco, fue echándolo de la trazada, allí donde el asfalto deja de serlo. Marc, incrédulo con la maniobra de Valentino, no pudo evitar el impacto y acabó viendo la carrera en la televisión. Rossi, en cambio, terminó tercero y con la mínima sanción de tres puntos en el carné de MotoGP, que le obligará a salir el último en la prueba final de Valencia.

Márquez describió con claridad el golpe recibido: "Me ha mirado dos veces y no entendía muy bien qué pasaba, hasta que he visto que sacaba la pierna y me ha dado una patada que me ha bloqueado el freno delantero. Esto me ha hecho caer". Rossi, por su parte, opinaba todo lo contrario: "Si se ponen las imágenes a cámara lenta se ve que cuando yo pierdo el pie de la estribera, Márquez ya está en el suelo. Yo quería molestarle, quería mandarle fuera de la trayectoria, quería decirle 'por favor, ¿qué cojones estás haciendo?'. He tratado de ralentizarlo y hacerle irse largo. Y cuando estábamos casi parados, bueno, muy lentos, nos hemos tocado, él me ha tocado con su manillar derecho en mi muslo izquierdo y es por eso por lo que ha caído. Es verdad que desde el lado parece que le he dado una patada. Si hubiese querido darle una patada podría habérsela dado al menos 30 o 40 metros antes, porque estábamos ya al lado el uno del otro, y en cualquier caso una MotoGP no se cae si le das una patada, porque es una moto que pesa mucho, que está de pie. En cambio, él me ha tocado con el manillar mi muslo y se ha caído".

Como es normal, hay opiniones para todos los gustos, tantas como formas de ver la realidad. El problema es que los comisarios han sancionado levemente la acción. Entenderán que se trataba de lances de la competición y que Rossi no quiso provocar la caída, como así reconoció Mike Webb, director de carrera. Pero la patada al motociclismo, ya está dada. Algo que, tal vez, podría haberse evitado, teniendo en cuenta las acusaciones que Rossi lanzó a Márquez dos días antes de la carrera: "No quiere que yo gane este Mundial, desea frenarme y ayudar a Lorenzo para que sea campeón", afirmó. Es obvio que alguien debió 'atarlo en corto'…

Hay varias preguntas en el aire: ¿debieron penalizar a Rossi antes de que acabase la carrera? ¿Mereció una sanción aún más dura, como perder los puntos? ¿El reglamento se aplica igual a todos los pilotos? Los responsables de dirección de carrera tenían todos los elementos y medios para hacerlo. Habrá que ver cómo defendieron sus posturas los dos pilotos y lo convincentes que resultaron para los comisarios. Lo que nadie duda es que, para bien o para mal, habrá un antes y un después de este infernal Gran Premio de Malasia.

La excepcional victoria que consiguió ayer Pedrosa, o el segundo puesto de Lorenzo, pasaron casi inadvertidos. Tampoco levantó muchas pasiones el título que se decide dentro de dos semanas en España. Sólo se hablaba de la maldita 'coz'. Pero lo más triste de ayer fue escuchar a Márquez y a Lorenzo afirmar que ya no le tenían respeto a Rossi, que ya no sería digno campeón por lo que había hecho. Cierro esta artículo leyendo en la prensa italiana que, tras lo sucedido, Valentino no tiene claro si correrá en Valencia. Quién iba a decir que podía acabar así uno de los mejores años de este deporte…

(*) Jesús Benítez es periodista y escritor. Fue editor jefe del Diario Marca y, durante más de una década, siguió todos los grandes premios del Mundial de Motociclismo. A comienzos de los 90, ejerció varios años como jefe de prensa del Circuito de Jerez.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios