La unión de ambos, como se dice coloquialmente “estaba cantada”. El chef jerezano Jaime Mena, del restaurante Akase, y Óscar Guerra (Chiclana, 1996) se conocieron en 2018. El primero creó una marca de ginebra y el segundo la introdujo en Chiclana. “Siempre hemos dicho que montaríamos algo juntos. Somos dos personas compatibles desde el segundo uno”, rememora el de Jerez.

Seis años después Guerra se puso en contacto Mena para abrir un nuevo proyecto gastronómico de cocina tradicional reconvertida. Guerra, por su parte, ya regentaba dos locales hosteleros que marchaban bien, pero, igual que todo, tiene un final. Entendió que los comensales agradecen una cocina más tradicional, más gaditana. Decidió mantener el mismo bar en la playa y reinventar el ubicado en calle Doctor Pedro Vélez, 4 donde ahora abre junto a Mena el restaurante RASA. “Se basa en una cocina moderna cuyos sabores recuerden a la gastronomía tradicional gaditana: más divertida, dinámica y con un emplatado más dinámico”, cuenta el jerezano.

Rasa significa ‘sabor’ y representa la esencia emocional que evoca sentimientos inexplicables. En este establecimiento pretenden despertar emociones que vayan más allá de las palabras con el sabor de su comida.

El restaurante, que verá la luz el sábado 23 de marzo, y según Mena, tendrá lo mejor de Jerez y de Chiclana: “No hay nada más jerezano que unas papas con choco, un guiso de nuestras abuelas, como decimos, preparado a fuego lento, y los chicharrones de corte chiclaneros”. También contarán con buenos vinos del Marco de Jerez, entre estos los de Primitivo Collantes, de una bodega de Chiclana.

Uno de los rincones de Rasa, en Chiclana.

Un espacio para vivirlo

Rasa acoge a un total de medio centenar de personas que pueden degustar su cocina o tomar una copa en mesas bajas o altas. Es posible comer en las barras, tanto en la interior como en la instalada en la terraza.

En este espacio minimalista y diáfano predominarán el color beis y el terracota. Serán los protagonistas junto a las plantas y a la madera. El jerezano tiene claro por qué: “Esos tonos son muy cálidos, nos hacen sentir muy cómodos y, al final, queremos estar a gusto en el lugar en el que trabajamos”.

Restaurante Rasa, en Chiclana.

Carta

Contempla platos, desde lo más típico que se estila como la ensaladilla, las croquetas, unas patatas bravas, hamburguesas o tres tipos de arroces, hasta otros platos menos comunes como un guiso de calamares servido dentro de un croissant con una salsa de tinta por encima o una tortilla de patatas acompañada de una cazuela con guiso de chocos. Algunos se presentan en tapas y medias raciones, otros sólo para compartir, como los es el caso de los arroces.

Aprovechando las agradables tardes de Chiclana, servirán copas entre el almuerzo y la cena, hasta la hora del cierre a la 01:30 horas. 

Los dos socios garantizan que degustarán una “auténtica comida tradicional elaborada por ellos, una cerveza muy fría y a un precio más que competitivo, con tapas que pueden rodar los tres, cuatro o cinco euros”.

Horario

De miércoles a sábado: almuerzos y cenas.

Domingo: almuerzos.