El ciclo 'Flamenco en la Plaza Alta', organizado por el Ayuntamiento de Badajoz en colaboración con Aqualia y la productora Actúa Ibérica, regresa con con su decimotercera edición. Las actuaciones tendrán lugar en la iglesia de Santa Catalina con cuatro de las cinco representaciones que acoge el ciclo. La programación consta de cinco espectáculos que se desarrollarán entre los meses de abril y noviembre.

El ciclo comenzará el próximo viernes 22 de abril con la actuación del cantaor Manuel Pajares, que irá acompañado por Juan Vargas al toque. El punto fuerte llegará el 13 de mayo con un espectáculo flamenco al aire libre en la Plaza Alta llamado 'Pequeña algaravía' liderado por Carmen la Parreña. La bailaora pacense estará acompañada de Paulo Molina e Ismael Solomando, al cante, Antonio Santiago, al toque y Morito Suero, en la percusión. 

En los meses de verano habrá una pausa del ciclo flamenco, retomando la actividad el 16 de septiembre con el concierto de la cantaora Esther Merino, que estará acompañada por Pedro Calero al piano. Celeste Montes actuará el 28 de octubre mientras que Alejandro Vega, el 18 de noviembre, junto a Juan Vargas a la guitarra cierra la programación del ciclo.

Todos los conciertos serán a las 20.30 horas y la entrada es gratuita hasta completar aforo. Paloma Morcillo, Concejala de Cultura, explicó que la capacidad de la Iglesia de Santa Catalina es aproximadamente de unas 150 personas, mientras que la Plaza Alta puede reunir unos 300 espectadores incluidos veladores y terrazas de los bares. 

La iniciativa ha sido presentada ayer por la concejala de Cultura, Paloma Morcillo, el director de Aqualia en Extremadura, David Díez, y el productor de la empresa Actúa Ibérica, Javier Pardo. Morcillo informó de que el programa en pasadas ediciones tuvo tal éxito que el anterior escenario, las Casas Consistoriales, se había quedado "muy pequeño". Pardo, organizador del programa, detalló que armar el cartel no ha sido fácil pues el objetivo ha sido aunar artistas consagrados, artistas emergentes y también dar cabida a la cultura gitana ya que sin ella considera que "faltaría algo muy importante".