El parqué
Con el foco en Ucrania
Antonio Calderón se ha labrado a base de trabajo su presente como entrenador profesional. Su salida del Cádiz el pasado año, en la que era su primera experiencia en la Liga de Fútbol Profesional, le posibilitó cambiar de aires y probar fortuna en el Huesca, un recién ascendido a Segunda. Su labor no ha pasado desapercibida para los dirigentes maños, que hace unos días sellaron su renovación.
Con la permanencia atada, el técnico gaditano intentará puntuar en su visita a Chapín, una empresa difícil porque entiende que "el Xerez está ascendido e incluso perdiendo puede subir si el Zaragoza gana al Córdoba. De cualquier forma, ya se sabe que en esto del fútbol hasta que las matemáticas no digan lo contrario todo puede pasar".
Calderón reconoce que "la victoria del otro día nos dio la permanencia y sobre todo tranquilidad, porque hemos tenido una racha muy mala de diez partidos sin ganar. Ahora, nuestra idea es acabar la Liga lo más dignamente posible. Puntuar allí es un buen resultado, y no digo ya ganar, aunque también sabemos que podemos perder, entre otras cosas porque el Xerez se juega muchísimo y va a tener su afición apoyándole, será un partido difícil".
El preparador del Huesca sólo tiene elogios para el Deportivo, al que ya destacó en la ida. "Tienen un buen equipo y desde la llegada de Esteban han tenido una progresión increíble, le ha dado un cariz de equipo campeón. Han sabido superar ese bajón que le presuponía y que ha tenido en anteriores temporadas e incluso reaccionó bien a la derrota que tuvo contra el Zaragoza con el cambio de sistema. El 4-1-4-1 le ha dado consistencia al equipo y ha ido viento en popa hasta el final".
Sobre la temporada realizada en el Huesca, el gaditano habla en positivo, pues su buena campaña le ha hecho renovar. "La tranquilidad me la da el trabajo, luego los resultados mandan, pero eso muchas veces se te escapa. Yo soy de los que pienso que cuanto más trabajo más suerte se tiene. Nosotros éramos un equipo de los candidatos a estar luchando hasta el último día por no bajar y con una temporada duro hemos pasado a tener una temporada muy plácida, el equipo ha hecho buen fútbol y estoy muy orgulloso y agradecido a los jugadores".
Reconocido cadista, Antonio Calderón admite que durante la semana "algún que otro amigo mío me ha llamado para que le gane al Xerez", comenta entre risas. No obstante, sobre este morbo resalta que "cuando uno es profesional ya no piensa como los aficionados. Aunque sea cadista desde pequeño, me gustaría hubiese más equipos de la provincia en Primera División, sería bueno para todo".
"Es cierto que alguna parte de la afición de Cádiz ve que el Xerez está por encima y eso no le gusta, pero esto es habitual y forma parte del fútbol. Lo mejor que podía pasar es que no solamente suba el Xerez, sino que también lo haga el Cádiz, eso sí sería una buena rivalidad", recalca el de La Caleta.
Por último, acerca de su experiencia en el Huesca destaca que "ha sido muy buena, tenía ganas de quitarme la espina porque en Cádiz pagué los platos rotos de una mala gestión. Este año el Huesca me ha vuelto a poner en mi sitio e incluso ha habido un par de clubes que se han interesado por mi situación, aunque he preferido quedarme aquí porque estoy muy a gusto".
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