Cd guadalajara · la crónica

El primer suspenso, mejor cuanto antes (0-2)

  • Revés Pobre imagen y derrota de un Deportivo que es despedido con bronca y gritos de 'fuera, fuera' mientras que el rival sale entre aplausos Duro Los azulinos se muestran impotentes ante un cuadro alcarreño que le domina de principio a fin

La primera bofetada es mejor recibirla cuanto antes. De la ilusión, a la más absoluta decepción en sólo una semana. Al Xerez no le salió nada en su puesta de largo en Chapín y encajó una justa derrota ante un recién ascendido Guadalajara que le sorprendió desde el primer momento. Los papeles se intercambiaron totalmente y el novato en la categoría parecía el cuadro local, incapaz de mandar.

Los azulinos ni jugando dos días seguidos hubiesen sido capaces de hacerle un gol al rival. Parece increíble que con Capi, Israel, Óscar Díaz, Pablo Redondo, Tato, José Mari e Íñigo Vélez sobre el terreno de juego -aunque no todos a la vez-, el equipo no fuera capaz de crear ni media oportunidad de gol, ni un tímido ¡uy!

Todas las buenas sensaciones mostradas en Santo Domingo frente al Alcorcón se quedaron en Despeñaperros porque de otro modo no se entiende la penosa imagen xerecista.

El Deportivo de Merino se llevó el primer suspenso de la campaña y la primera pitada de una afición que esperaba mucho más. Chapín dejó claro que esta temporada no va a tener paciencia con el equipo ni tampoco le va a perdonar mucho, después de lo que le tocó vivir el pasado ejercicio con Javi López.

Y es que superado el primer cuarto de hora, comenzaron a llegar las oportunidades visitantes. En el minuto 16, Chema se luce con una mano abajo para sacar un remate de cabeza de Barral tras una falta lanzada por Ernesto. Sólo dos minutos después, otro despiste atrás obligó a Gerard a tirarse a pies de Moreno para evitar un remate claro ante el guardameta alicantino.

Y tanto fue el cántaro a la fuente hasta que terminó rompiéndose. Aníbal está más listo que los defensores, que le cierran mal, realiza una buena diagonal y bate a Chema con una volea junto al palo izquierdo, tras recoger un pase de Ernesto.

Al Xerez, que no comenzó mal, se le hizo de noche en el centro del campo y se convirtió en una sombra de lo que fue en Alcorcón el sábado. Estuvo espeso, no pudo sacar cómodo el balón desde atrás por la presión del rival y comenzó a abusar del pelotazo para superar a un rival que comenzó a nadar y a guardar la ropa, buscando siempre las contras con Aníbal y Arriaga arriba, jugadores que crearon mil problemas a los xerecistas.

Con todo en contra, Juan Merino no se lo pensó y tomó una decisión tan arriesgada como sorprendente. En el minuto 41, mandó a la ducha a los dos bandas, Israel y Óscar Díaz. El madrileño se quedó helado y sin saber qué hacer en el banquillo pero el ex bético se lo tomó un poco peor. Se marchó directamente al vestuario, no sin antes propinar un patadón, fruto del enfado, a uno de los balones que los recogepelotas tenían en la pista de atletismo. Tato y Pablo Redondo entraron entonces en liza.

¿Castigo? ¿Un mensaje para todo el equipo con sólo dos protagonistas porque no podía cambiar a los once de una vez? Lo que es evidente es que Merino dejó así constancia de su monumental enfado con sus jugadores por la pobre imagen que estaban ofreciendo.

Y Tato, justo antes de que un Miranda Torres tan descentrado como el Xerez, señalara el final de los primeros cuarenta y cinco minutos estuvo a punto de darle la razón a Merino. El ex del Albacete controló dentro del área un balón de Capi y falló cuando lo más fácil era empatar.

Lo peor estaba por llegar. La segunda parte arrancó con una jugada polémica, en la que los xerecistas pidieron penalti sobre Tato y justo después llegó el mazazo que nadie esperaba.

Ernesto recibió un balón a más de treinta metros, vio adelantado a Chema y no se lo pensó. Le pegó de cine y dejó mudo a un estadio que no se creía lo que estaba presenciando.

Los nervios y la precipitación se apoderaron de un cuadro azulino al que le costaba cada vez más llegar arriba ante la tranquilidad de un Guadalajara que menos debutante en la categoría parecía de todo. Sin presión, seguro y cómodo, cada vez que se acercaba a la meta de Chema creaba peligro.

Para que a la tarde aciaga del Xerez no le faltara de nada, a la hora de juego se lesionó Gerard, que tuvo que dejar su puesto a Cordero, con lo que Rafa Barber terminó de central.

El reloj avanzó demasiado lento para el Xerez y mientras los de Merino no eran capaces de dar dos pases seguidos ni de hilvanar jugadas con las que atemorizar a su rival, los de Carlos Terrazas cada vez se sentían más y más cómodos y tenían tiempo para saborear los tres primeros puntos de la temporada fuera de casa.

Ficha técnica:

0 - Xerez: Chema; Barber, Iñigo Vélez, Oscar Díaz (Tato, m.40), Capi, Israel (Pablo Redondo, m.40), Gerard Autet (Cordero, m.63), Raúl Cámara, Raúl Llorente, Robusté y José Mari.

2 - Guadalajara: Saizar; Moreno (Jony, m.59), Barral (Víctor Fernández, m. 85), David Fernández, Arriaga, Javi Soria, Aníbal, Ernesto, Iván Moreno (Gago, m.46), Jorge y Jonan.

Árbitro: Miranda Torres (C. Catalán). Regular y muy protestado. Los azulinos le reclamaron al principio de la segunda parte un penalti sobre Tato que como mínimo debió ser libre indirecto.

Tarjetas: Amarillas Capi (18’), Pablo Redondo (72’); Iván Moreno (6’), Barral (58’), Jony (72’), Gago (82’) y Arriaga (92’).

Goles (0-1) 22’ Aníbal marca de volea junto al palo izquierdo tras un fallo defensivo y un pase por arriba de Ernesto.  (0-2) 54’ Ernesto supera a Chema, un poco adelantado, desde más de treinta metros y anota un auténtico golazo.   

Incidencias: Encuentro correspondiente a la 3ª jornada de la Liga Adelante -el primero en casa porque el que abría la competición ante el Sabadell no se disputó por la huelga convocada por AFE- jugado en Chapín ante 8.482 espectadores.

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