La selección española masculina de voleibol afronta frente a Noruega (20:30) en Melilla su tercer partido de la fase de clasificación para el Europeo de 2019 con el objetivo de ganar y recuperarse de su derrota en la muerte súbita en la cancha de Bielorrusia (3-2).

España, que en la primera jornada, también en el pabellón Javier Imbroda Ortiz de Melilla, ganó con comodidad a Georgia (3-0), colista del Grupo E que lidera Bielorrusia, es segunda con cuatro puntos, a uno sólo del primero y con uno más que los noruegos, terceros con tres.

El combinado que dirige Fernando Muñoz cerrará este maratón de encuentros este sábado devolviendo visita a Noruega, mientras que sus dos últimas citas del Preeuropeo serán los días 6 y 9 de enero.

Muñoz repitió la convocatoria de las dos primeras jornadas y, tras un entrenamiento en el escenario del partido, declaró que los españoles llegan en buenas condiciones para ganar a Noruega, que viene de vencer a Georgia por 3-0.

"Afrontamos el partido con cierto enfado, ya que podemos dar un nivel mejor del que ofrecimos el domingo, pero en Bielorrusia también supimos sufrir y sacamos adelante el cuarto set, que probablemente pueda ser importante de cara a la clasificación", destacó el seleccionador.

Por su parte, el equipo femenino se enfrenta a la selección bosnia (18:00) en un choque vital para las aspiraciones nacionales. Tres puntos clave desde que se conoció la composición del grupo de clasificación para el Campeonato de Europa y que tras los resultados de las primeras jornadas han aumentado en importancia. Bosnia llega a la cita con dos partidos ganados, una gran remontada en Rumanía en el partido inaugural y más claro el triunfo ante Letonia, y situado en la primera plaza del grupo.

El seleccionador Pascual Saurín corroboraba la importancia del encuentro. "Las matemáticas no mienten. Si queremos tener opciones todo pasa por estos dos partidos ante Bosnia", explicó.