Las comunidades autónomas de régimen común ingresan alrededor de 1.200 millones por los tributos propios y recargos sobre impuestos estatales, de los que la mayor parte proceden del canon de agua o de saneamiento que aplican en sus respectivos territorios. Así se desprende de un informe sobre tributación autonómica del Ministerio de Economía que recoge la recaudación en 2008 de cada uno de los impuestos propios.

En la actualidad todas las autonomías de régimen común, excepto Castilla y León, tienen impuestos propios vigentes. Este año dos autonomías han creado un nuevo impuesto. Cantabria ha puesto en marcha uno que grava el depósito de residuos en vertedero y Galicia el canon eólico.

La relación de tributos propios y recargos es diferente en cada comunidad y oscila desde el máximo de seis de Murcia y Cataluña al único de Castilla-La Mancha. También es muy dispar el concepto que grava cada comunidad en función de sus competencias para ello: desde las actividades que pueden dar lugar a la activación de planes de protección civil, al juego del bingo, los vertidos y residuos o la caza. Pese a que el Ministerio no dispone de la recaudación de todos los impuestos -alguno ha empezado a ser exigible este año-, sí ofrece cifras de la práctica totalidad, que arrojan una suma de unos 1.200 millones, con los que se podrían construir 360 kilómetros de autovía.

Es Cataluña la que más ingresa en sus arcas por esos impuestos, con casi 400 millones: 321 corresponden al canon del agua, uno de los seis tributos propios de la comunidad, que también grava la deposición controlada de residuos municipales, la incineración o los residuos de la construcción. La recaudación de los tributos propios en Andalucía alcanza los 18 millones.