El sacerdote Ángel Romero Castellano será nombrado Hijo Adoptivo de Jerez

La Junta de Gobierno Local, en su reunión de ayer, aprobó iniciar el expediente para la concesión del título de Hijo Adoptivo de Jerez al sacerdote y actual párroco, desde hace más de cuatro décadas, de San Miguel, Ángel Romero Castellano. Desde ahora se abre un plazo de tiempo para la presentación de alegaciones, un procedimiento que culminará con la convocatoria de un Pleno solemne y extraordinario en el que se le entregará la distinción. El cura de San Miguel, como a él le gusta que le llamen, es Prelado de Honor de su Santidad, título concedido por el Vaticano en marzo de 2001. También es académico numerario de la de San Dionisio desde enero de 2000. Además de su ministerio sacerdotal en San Miguel, es también juez del tribunal eclesiástico de la diócesis jerezana habiendo ostentado con anterioridad la vicaría Judicial del obispado con una trayectoria de alrededor de cuarenta años al frente de este cargo. Su ciudad natal es Lebrija, desde la que inició su ministerio en diferentes destinos después de que el 15 de junio de 1952, monseñor Romero Castellano fuera ordenado sacerdote en la capilla del Seminario hispalense de San Telmo. El 15 de junio de 2012 cumplió 60 años de vida sacerdotal. Su primer destino fue el pueblo serrano de El Gastor donde, con 23 años, estuvo destinado durante cuatro años. Seguidamente el arzobispo de Sevilla, archidiócesis de la que entonces dependía la iglesia de Jerez, lo mandó a Chipiona y finalmente los últimos 42 años desarrolla su vocación siendo párroco de San Miguel.