Cañamero pide al pueblo que "despierte del letargo"

El portavoz del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), Diego Cañanero, pasó ayer por Jerez invitado por el movimiento 15M. Lo hizo a última hora de la tarde en la Plaza del Arenal en un día un tanto ajetreado. Cañamero había sido detenido en la tarde del pasado martes en El Coronil como imputado en la ocupación de la finca Las Tendillas. Por esta razón, el sevillano pidió disculpas a los asistentes, alrededor de unas trescientas personas, ya que el acto previsto para las ocho de la tarde no comenzó hasta pasadas las ocho y media.

"He tenido un día muy duro-explicó Cañamero- porque me detuvieron ayer, pasé la noche en el calabozo en Sevilla, por la mañana me trasladaron a Granada y tras ponerme en libertad, a eso de la 13.30, lo único que me ha dado tiempo es de llegar a mi casa, ducharme y venir aquí", destacó en medio de los aplausos del respetuoso público que escuchó expectante su discurso en plena Plaza del Arenal.

El portavoz del SAT enmarcó su comparecencia en la realidad social de Jerez y del resto de ciudades de Andalucía, criticando la falta de ayudas para sofocar el gran problema del paro. "Este sistema nos está quitando el pan, el agua y los derechos, por eso el pueblo debe despertar, si los pueblos no despiertan las ciudades se convierten en cementerios y eso sólo trae tristeza y llanto".

Además, ensalzó la labor del Movimiento 15M "una experiencia valiosísima por el deseo de cambio y justicia social", indicó. Al mismo tiempo solicitó "la movilización social" cargando contra "los privilegiados, esos a los que nos les importa el pueblo, sólo generar más dinero", y a los políticos, un estamento al que atacó duramente. "No nos representan. En el momento que ganan cinco veces más que nosotros ya no nos representan, no están a la altura del pueblo ni cumplen con su cometido que es servir al pueblo, no aprovecharse de él".

Cañamero admitió sentirse "orgulloso de ser jornalero" y mandó un mensaje de esperanza a los "770 pueblos de Andalucía. El día que todos se levanten, temblarán los políticos".

El sindicalista se refirió también a su postura de "insumisión judicial", que a su juicio "es una protesta por toda la represión que está sufriendo el sindicato. En estos momentos tenemos 650 procesados, les piden 400.000 euros de multa, hemos pagado 150.000 ya y nos piden 60 años de cárcel. Que a nosotros, que somos pacíficos y lucha, no debemos tener un castigo tan desmesurado. Incluso vemos que hay listas negras que las sacan en todas las movilizaciones y a veces ni siquiera participamos".

Además, criticó que "nuestros abogados ni nuestros testigos no son escuchados, que los jueces tienen el papelito debajo del cajón antes de llegar... El poder judicial tiene que ser independiente, pero parece que no, que todo está teledirigido, y por eso es la protesta desde hace ya 3 años".