El Cuerpo Nacional de Policía ha detenido a siete personas (cuatro de ellas de la misma banda) como presuntas autoras de distintos delitos durante los últimos días. El cabecilla de la banda es J.P.R., de 20 años, que cuenta con numerosos antecedentes, y que, en el momento de su localización, conducía un ciclomotor que había sido sustraído y denunciado ante la Guardia Civil en Arcos.

El joven, tras hacer caso omiso al requerimiento policial para que se detuviera, continuó circulando con "absoluto desprecio", manifestó ayer la comisaría, llegando a poner incluso en grave riesgo tanto a viandantes como a otros vehículos mientras duró la persecución. Uno de los agentes resultó lesionado a consecuencia del operativo. Se le ha podido imputar el robo realizado en el interior de un coche del que logró apoderarse, además de algún dinero en efectivo, de documentos personales con los que posteriormente fueron cometidos otros hechos delictivos, como los de la obtención fraudulenta de reintegros y extracciones económicas en cajeros automáticos de entidades bancarias.

La Policía prosiguió investigando y ha detenido a otros tres supuestos compinches suyos, J.L.H.G., de 20 años, A.C.V.G., de 19 y S.A.R., de 21, que robaron hasta cuatro ciclomotores en Arcos y a los que se les ha decomisado numerosos efectos procedentes de robo como 'radiocasetes', etapas de potencia y altavoces. Los agentes están haciendo gestiones para hallar a sus dueños.

Durante el fin de semana la Policía abortó un intento de robo en un comercio de la zona de Madre de Dios y recuperó un coche robado en El Puerto con la detención de otros tres jóvenes: D.MM.B. de 19 años, mientras los otros dos sospechosos resultaron ser menores con 17 y 16 años respectivamente. Los policías de los 'zeta' y de la Unidad de prevención y reacción (Upr) les fueron intervenidas varias prendas como guantes de lana para no dejar huellas y la utilización de capuchas para cubrir sus cabezas.

Las mismas unidades se personaron en la zona adyacente al tanatorio, ya que había una concentración de personas. Los agentes de la brigada de seguridad ciudadana intervinieron a un joven un aparato de autodefensa con una alta carga eléctrica. Este aparato se utiliza para la inmovilización de cualquier persona a la que se dirija, indicó ayer la comisaría en un comunicado de prensa. Es un instrumento prohibido por la Ley de Seguridad Ciudadana de 1992 por lo que le fue intervenido y se le levantó la correspondiente acta de aprehensión.