"Sentirse guapa" durante el cáncer

A la hora de afrontar una enfermedad como el cáncer, muchos son los obstáculos que se interponen en el camino de los que lo padecen, que tienen que soportar numerosas horas de quimioterapia y diversos tratamientos que los terminan afectando psicológica y físicamente. En el caso de las mujeres, cuya estética es más "delicada" que la de los hombres, estos cambios físicos suponen un mayor impedimento si cabe.

Con el objetivo de conseguir que las mujeres que sufren esta enfermedad no dejen de sentirse "femeninas", Grupo Gálvez Peluqueros ha creado un programa específico para "ayudarlas a arreglarse", ofreciendo toda una gama de productos de estética y cosmética creados con este fin.

Juana Poyatos, la coordinadora del programa, es la encargada de recibir a toda aquella mujer que se acerque por su estudio, situado en el centro de formación que Grupo Gálvez tiene en la calle Larga. Para Juana es indispensable ofrecer este servicio. La idea fue de su jefe, que se percató de que "no existe nada parecido en Jerez" aunque matiza que "no todo el mundo puede estar preparado para llevarlo", y por ello "pensó en mí", asegura.

Juana, que ha superado un cáncer y que atesora una gran experiencia en el mundo de la peluquería y la estética, era la persona idónea para el puesto, porque como ella misma asegura "nadie comprenderá a estas personas mejor que yo".

"En Jerez no hay un gabinete especializado en el tratamiento a personas que tienen cáncer y que pierden el pelo o las cejas, por ello nosotros trataremos de ayudarlos para que se sepan arreglar durante el tiempo que están afectadas por los efectos secundarios de la quimioterapia".

La coordinadora del programa considera que este proceso debe ser "privado", pues "en mi caso particular yo tenía una maquinilla para pelarme en mi propia casa, pero durante los años que trabajé en Hipercor como encargada de peluquería tuve que cortarle el pelo a personas a las que se les estaba cayendo delante de todo el mundo, algo que no me parece bien".

Por ello, en su gabinete privado, Juana recibe individualmente a cualquier interesada, a la que se le da un trato "personal". En su interior se pueden probar las distintas pelucas de pelo natural, comprar lápices para pintarse las cejas "que no se van con el agua", pañuelos para la cabeza, pestañas postizas y todo tipo de productos.

"En mi gabinete tengo varios modelos de pelucas que se pueden probar 'in situ', aunque si la clienta no está convencida se le puede pedir otro por encargo", matiza Juana. Y continúa: "aquí las enseñamos a automaquillarse, pues tampoco puedes ir maquillada en exceso, porque se ve antinatural. Todo se basa en mi experiencia propia, por lo que voy a transmitirles a estas personas cómo le pueden sacar partido a su imagen".

Este programa comenzó la semana pasada, "una vez recibimos todo el material necesario", y la idea parece que está empezando a dar sus frutos, pues "ya han sido varias las mujeres que han venido por pañuelos e interesándose por varios productos", comenta Juana.