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Vecinos han vuelto a detectar la presencia de traficantes de droga en la polémica calle Z de la barriada de Federico Mayo apenas tres meses después de que el grupo de elite policial Greco desarrollara una gran redada -la operación 'Corralito'- en esta vía y otros 'puntos negros' de Jerez, según ha podido conocer este medio. Los encarcelados a raíz de esta redada prosiguen en prisión en calidad de preventivos.
Fuentes policiales consultadas por este medio no descartan que otros traficantes se hayan asentado de nuevo en la calle Z una vez la cosa se 'calmara'. "Suele ser habitual. La droga es un negocio como cualquier otro. Si hay demanda siempre habrá quien la venda", indican. La historia se ha repetido por los mismos motivos en otros puntos de Jerez, aunque las intervenciones policiales y judiciales han logrado, por ejemplo, cambiar en gran medida la situación de inseguridad que el tráfico de drogas generaba en las casitas bajas. Parece ser también que la actual situación en la calle Z podría ser relativamente de menor intensidad a la que se vivía antes de la operación desarrollada por el Grupo de respuesta contra el crimen organizado (Greco).
Paralelamente, el juzgado número 3 mantiene abierta la instrucción de la 'operación corralito'. Se van produciendo avances, como en la investigación del patrimonio de los detenidos, pero es pronto para precisar cuándo se celebrará el juicio por la operación antidroga más importante de los últimos años por su amplitud. La investigación judicial se ha dividido en tres piezas. Un total de 29 personas detenidas y la incautación de casi tres kilos de cocaína a raíz de la práctica de 16 registros domiciliarios fueron los resultados más destacables desde el punto de vista policial.
Dos funcionarios de la Policía Local fueron imputados por no perseguir supuestamente delitos (es una de las tres piezas del actual procedimiento). Su situación legal no ha cambiado, han indicado fuentes jurídicas. Al parecer, según ha podido conocer este medio, los imputados (que no fueron detenidos por la Policía) podrían haber facilitado supuestamente algún tipo de información confidencial a un presunto narco del Polígono.
En su descargo, el Ayuntamiento presentó el mismo agosto en el juzgado instructor hasta 21 actuaciones realizadas por el grupo de la Policía Local al que pertenecen los dos agentes contra el clan desmantelado durante los últimos años.
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