Teatro de aficionados
Jerez, tiempos pasadosHistorias, curiosidades, recuerdos y anécdotas
De los más grandes aficionados que hicieron teatro en Jerez siempre habrá que recordar los nombres de Agustín Brotons, Arturo Paz, Ignacio Román, Antonio Durán, Juan Benítez, Luis Bueno, Reyes García y Milagros Pacheco, entre otros muchos de actores y actrices inolvidablesCuadro de actores aficionados jerezanos que representaron, en 1935, la obra de Luis Fernández de Sevilla y Rafael Sepúlveda, 'Madre Alegría'. Entre ellos figura el maestro Agustín Brotons y, arriba, a la izquierda, el guitarrista Sebastián Núñez, junto al cantaor Pericón de Cádiz que colaboró en dicha obra.
EN nuestra ciudad, en tiempos pretéritos, siempre hubo una gran afición al teatro, desde que los jerezanos, en los siglos XVII y XVIII, abarrotaran los antiguos corrales de comedias de San Juan de Dios y de la cuesta de las Vacas (hoy, calle Santa Isabel), amén de las casas de comedias de la calle Francos y de la antigua Bajada de la Cárcel (hoy José L. Díez), hasta que a comienzos del XIX abriera sus puertas el Teatro Principal, en calle Mesones (donde El Quinqué) y más tarde el Eslava, hasta que el marqués de Villamarta dotara a Jerez del gran teatro que lleva su nombre, tan poco afortunadamente restaurado, hace pocos años.
Los jerezanos siempre fueron grandes amantes del teatro, y no digamos de la zarzuela y la ópera, de la que hablaremos otro día. Dando todo ello lugar a que, en nuestra ciudad, se formaran excelentes cuadros artísticos de actores aficionados, entre la gente joven de institutos y colegios, así como de creación independiente, como "Los amigos del arte" y la Sociedad Cervantes, a comienzos del pasado siglo; la agrupación "Antonio Vico", nuestro máximo actor profesional, que diera nombre a más de uno de estos conjuntos; los grupos del Centro Católico Obrero, "Ánfora, Club de Arte", "Vanguard", Los Novatos, Los Retablos Infantiles y Juveniles, etc. Siendo el más antiguo grupo teatral de aficionados la denominada Sociedad Dramática de mediados del siglo XIX.
Nosotros que, de joven, llegamos a formar parte de dos de estas agrupaciones - las de la Escuela San José y del Oratorio Festivo, concretamente - recordamos muchas de las extraordinarias actuaciones de la mayoría de los cuadros artísticos de aquellos actores aficionados que pulularon, en Jerez, a mediados del siglo XX. Y, especialmente, recordamos la inmensa labor que, en pro del teatro, llevaron a cabo estupendos actores y actrices de aquellos tiempos; empezando por el gran maestro de todos ellos, el inolvidable Agustín Brotons - para el que el Cine Club Popular debe pedir una calle ya-, que tantas agrupaciones dirigió, actuando en otras y colaborando con la mayoría de ellas; así como los llamados Antonio Durán, Luis Bueno y Antonio Cárdenas, del cuadro artístico del Buen Pastor; Arturo Paz, que formó en tantas proyectos teatrales; Ignacio Román, autor de canciones, además; Juan Benítez Cantos que se adaptaba a toda clase de papeles, bien fueran cómicos, dramáticos o de teatro lírico; además de ser el mejor imitador del célebre Cantinflas; el actor cómico Guayarmino; el estupendo actor Pedro Cómez, entre otros; mi querido amigo Luis Ferrer Casas; y las grandes actrices de Amigos del Arte, Reyes García y María Luisa Martínez Delgado, esposa ésta de Agustín Brotons, padres, ambos, de mi viejo amigo Tomás Brotons Martínez, recientemente fallecido, que siguiera los pasos paternos en tantas actividades teatrales, siendo jefe de atrezzo de Villamarta, antes de su cierre. Sin olvidarnos de actrices como Lucía Osuna, Pepita Castrelo, Maruja Troncoso, Conchita López Valverde y, entre otras, Milagrín Pacheco, que bordaba como nadie el teatro de los Quintero y que tantas veces protagonizara el graciosísimo diálogo de "Sangre gorda", junto al magnifico actor cómico Esteban Viaña; o haciendo papeles dramáticos, junto a su marido el genial y gran actor Pepe Marín.
La sociedad "Amigos del Arte" fue, quizás, la agrupación teatral amateur que más actividad tuvo en nuestra ciudad, en los años veinte y treinta del pasado siglo, siendo numerosas sus salidas a pueblos de nuestro entorno, como la que realizaron en 1936 y 1937, con la obra "Morena clara" de Quintero y Guillén; siempre actuando con fines benéficos.
El teatro de aficionados en Jerez tuvo un siglo XX realmente glorioso; pero luego parece que ha debido venirse algo abajo, ya que nosotros desconocemos las posibles actividades teatrales que puedan tener las actuales agrupaciones artísticas, si es que existe alguna, cosa muy de desear, para que no se pierda la siembra que aquellos esforzados paladines del teatro aficionado que tantas funciones llegaron a representar, con verdadero y exquisito arte, durante más de cien años .
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