La barriada La Teja vive en el abandono, así es como lo denuncia la asociación vecinal. De hecho, lo vienen denunciado desde ocho años. El presidente del colectivo, Mario Vázquez, alerta de que “pagamos los impuestos como todo el mundo, pero llevo viviendo aquí 15 años, mi mujer 36, y los barrenderos por aquí pasan poco, hemos conseguido tras mucha presión que vengan desde hace un tiempo”.

Desde hace cuatro meses Vázquez es el presidente de la barriada y denuncia que “por aquí pasa un antiguo canal de regadío que lleva cerrado por lo menos doce años... Esto ya es una zona de escombros, ratas, bichos; aquí tiran neumáticos, electrodomésticos e incluso uralita. En el canal se estanca el agua y apesta, vamos, que mis ventanas no las puedo abrir por los olores. Es insoportable”. “He ido a la Junta de Andalucía con un escrito y me dicen que no sabe de quién es la responsabilidad del canal. He ido al Ayuntamiento y tampoco sabe nada, la Confederación Hidrográfica lo mismo... Aquí se tiran la pelota y nadie viene a limpiar. Ruego que las administraciones se pongan de acuerdo para solucionar este grave problema en la barriada”, critica Vázquez.

El presidente vecinal ha mantenido una reunión con la delegada Ana Hérica Ramos “pero de la palabra al hecho..., no ha habido ningún cambio. También he hablado por teléfono con el delegado Rubén Pérez, por la seguridad, pero aún no nos hemos sentado”.

“Esta barriada se ha convertido en la barriada de los escombros, todo el mundo viene a tirar las cosas aquí. Y la seguridad también brilla por su ausencia. En una explanada se junta la gente joven y en alguna ocasión se ha llamado a la Policía y nos han dicho ‘pero esa barriada, ¿dónde está?’ Así estamos”, lamenta el presidente.

La asociación también ha informado al Ayuntamiento mediante un escrito que el antiguo puente de la barriada “tiene un muro roto tras el paso de un camión de basura, dejando aún más peligroso el acceso a la barriada”. Asimismo, ha pedido que se instale una zona reservada para los contenedores de basura porque en ocasiones “se encuentran en zonas de tierra y es muy difícil abrirlos”. “Necesitamos que nos atiendan, que tomen nota de nuestras muchas necesidades porque en La Teja no se ha hecho nada por adecentarla”, reclama Vázquez.