El primero de los camiones con productos de la empresa sevillana Magrudis que fueron intervenidos por el brote de listerioris entró en las instalaciones de la cementera de Jerez sobre las once de esta mañana.

El camión que transporta las partidas de alimentos que van a ser incinerados en la cementera de la carretera de Medina fue escoltado por vehículos de la Guardia Civil desde Sevilla hasta la ronda de la autovía Jerez-Los Barrios.

Llegó a la fábrica ya sin escolta, aunque en el interior de la empresa que procederá a quemar los alimentos en mal estado le esperaba una dotación del Seprona que realizará el proceso, que durará entre dos y tres días. Se está a la espera de la llegada de un segundo camión procedente de las instalaciones de Magrudis en las próximas horas.

En ambos casos, los camiones llevan precintos que son retirados por los agentes de la Guardia Civil antes de proceder a la descarga de los productos.

El horno de la cementera jerezana alcanza los 2.000 grados de temperatura y tiene capacidad para incinerar 10.000 kilos a la hora.

Se prevé que en los próximos días sean destruidos mediante incineración unos 6.000 kilos de productos cárnicos que la empresa sevillana elaboró en su nave del polígono hispalense de El Pino.