Los directores de los colegios públicos La Marquesa y El Membrillar, han denunciado que desde hace más de un mes han escrito cartas y han tratado de ponerse en contacto por todo tipo de medios con la delegación municipal de Educación, "donde habremos llamado en unas veinte ocasiones hablando con varias personas de dicha delegación y este mismo proceso lo hemos repetido con la delegación municipal de Medio Ambiente".

El problema se trata de que, a principios del presente curso escolar, realizaron un proyecto para que la Diputación provincial les abasteciera de plantas de jardinería y arbolado para ambos centros. El proyecto fue aprobado y los propios colegios han sufragado los gastos y esfuerzos para recoger las plantas y árboles concedidos. "Ya hemos trasplantado -explican los directores- las flores y las plantas de tamaño medio, pero el problema viene a la hora de trasplantar diez árboles medianos, de no más de veinte kilos de peso, para los que es necesario hacer seis pequeños agujeros de sesenta centímetros de profundidad y otros sesenta de diámetro en el patio de albero de Infantil, patio al que salen más de 150 niños de 3 y 4 años y que no tiene zona de sombra, a pesar de haberse solicitado al Ayuntamiento desde hace dos cursos escolares la plantación de arbolado".

En el Membrillar ocurre lo mismo con los otros cuatro árboles y según los directores, "resulta que tras todas las consultas anteriores al Ayuntamiento y después de pasarse la bola entre ellos o darnos informaciones cruzadas, nos comunican finalmente desde la delegación municipal de Educación que no tienen recursos humanos ni materiales para trasplantar los árboles".

Ambos directores califican de "inadmisible que un Ayuntamiento que atiende a una población de más de 200.000 habitantes y con una plantilla inflada en las áreas de Educación y Medio Ambiente no pueda atender a tan ínfima petición", por lo que ruegan a la Administración local que "tomen las medidas oportunas y nos la comuniquen a la mayor brevedad posible, porque los árboles se nos están secando, y den solución a esta demanda".

Hace unos diez días que en Diputación les dijeron que no podían aguantar más tiempo los árboles, por lo que tuvieron que recogerlos ellos mismos y desde entonces se encuentran en una cuba donde echan arena y agua para tratar que no se sequen.

Esta situación afecta a unas setecientas familias entre ambos centros "que pagamos nuestros impuestos y esperamos una gestión eficaz antes de tomar medidas de protesta más drásticas a través de las familias como sentadas, manifestaciones o cortes de carretera".