Un congreso de unos 800 auxiliares de Enfermería llena el Villamarta

Unos 800 auxiliares y técnicos en Cuidados de Enfermería participan desde ayer en un congreso nacional organizado por la Fundación para la Formación y Avance de la Enfermería (FAE) que se celebra durante tres días en el Teatro Villamarta, que por segunda vez en su historia acoge un congreso.

Los trastornos mentales en su conjunto son la primera causa de discapacidad en el mundo y entre un 4 y un 5% de la población europea sufre algún trastorno sicológico, porcentaje que asciende al 9% en España, según dijo ayer la presidenta de FAE, Dolores Martínez, justificando de esta manera que en esta ocasión el congreso se haya dedicado a la salud mental y a la psiquiatría, así como a la labor que desempeñan los auxiliares de Enfermería. "Nuestro papel es el del acompañamiento, el de la comprensión. Nosotros como enfermería básica que somos nos dedicamos a estar con el enfermo, administrarle los medicamentos que le han prescrito otros profesionales y cuidarles porque algunos no pueden hacer nada por si solos. Somos un equipo y hay un engranaje muy importante". No obstante, pese a admitir que se trata de enfermos difíciles, manifestó que los escollos más importantes los encuentran estos profesionales en la Administración. "Nosotros por problemas de titulación no tenemos reconocido lo que verdaderamente hacemos".

A la inauguración asistió el delegado provincial de Salud, Hipólito García, quien dijo que aunque la crisis impide fijar grandes retos "intentaremos seguir mejorando la atención a estos trastornos", al mismo tiempo que abogó por terminar con los estigmas que aún tiene la enfermedad mental. También estuvo en el acto el director del hospital, Manuel Herrera, que recordó que precisamente hace tres meses se cumplían 25 años de la creación de la Unidad de Salud Mental de Jerez y resaltó la importancia de la integración de los profesionales a la hora de abordar el tratamiento a estos enfermos. Igualmente, la alcaldesa Pilar Sánchez, dio la bienvenida a los asistentes y les invitó a conocer el patrimonio de la ciudad.

En el estigma que rodea a los enfermos mentales se centró el primer ponente, Eulalio Valmisa Gómez, director de Salud Mental del hospital de Puerto Real. Subrayó que la persona con una enfermedad mental debe afrontar una doble dificultad para recuperarse: la enfermedad en sí y los prejuicios y discriminaciones que recibe por padecerla. "Es el estigma social una carga de sufrimiento que incrementa innecesariamente los problemas de la enfermedad y constituye uno de los principales obstáculos para el éxito del tratamiento y de la recuperación", señaló.

Cesárea Pimentel, auxiliar de Enfermería del hospital madrileño La Princesa, expuso las características de una patología relativamente nueva que es el trastorno límite de la personalidad, que afecta casi a un 2,5% de la población adulta, aunque estimó que existen muchos casos sin diagnosticar. Los pacientes presentan inestabilidad en las relaciones interpersonales, la imagen del yo y los afectos, así como una importante impulsividad.

En la primera jornada del congreso también participó, entre otros, el gerente de la Fundación Pública Andaluza para la Integración Social de Personas con Enfermedad Mental (Faisem), Manuel Alén Fidalgo, que habló sobre la atención individualizada a estos pacientes. Alén Fidalgo destacó el cambio que ha experimentado la atención a las personas afectadas en los últimos 30 años en Andalucía, refiriéndose al desarrollo de la red de servicios sanitarios "y el crecimiento de los recursos".