La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA-Cádiz) anunció ayer que las pérdidas ocasionadas en el sector algodonero por las últimas precipitaciones -cayeron un total de 130 litros por metro cuadrado en tan sólo tres ó cuatro horas durante la madruga del viernes al sábado pasado-, serán "muy cuantiosas". Aunque las lluvias torrenciales han afectado al cultivo en toda la provincia, "la peor parte se la ha llevado la comarca del Noroeste, con las localidades de Rota, El Puerto, Sanlúcar de Barrameda y Chipiona", concretaron. Al tiempo que señalaron que entre un 30 y un 50% de toda la superficie de algodón en esta comarca "ha quedado arruinada aunque en las fincas colindantes con el Arroyo Salado, que discurre desde Chipiona y Rota hasta El Puerto y que se ha desbordado, las pérdidas alcanzarán al cien por cien de los cultivos".

Ante este panorama, desde UPA señalan que las pérdidas económicas de los agricultores de la provincia de Cádiz "superarán los 2 millones de euros, a lo que habrá que sumar la merma de ingresos al no alcanzarse los parámetros de calidad exigidos para cobrar las primas que establece la normativa, ya que los algodones que han conseguido sobrevivir quedarán manchados e inutilizables". Así, UPA-Cádiz cuantifica las pérdidas en otros 3 millones de euros adicionales "por no lograrse esa calidad mínima exigida". Desde esta organización agraria advierten también de que "los productores que cultivan producción integrada (a medio camino entre la ecológica y la convencional) verán difícil cobrar las ayuda agroambiental ante la pérdida de las cosechas, que se cifra en 350 euros por hectárea". Por estos motivos, adelantaron que pedirán a la Administración provincial y autonómica un "apoyo específico" para los cultivadores así como salvedad a algunos de los requisitos actuales que marca la normativa para poder cobrar las ayudas dadas estas circunstancias excepcionales provocadas por la adversa climatología.