A principios de 2013, con un sector de la construcción e inmobiliario aún en la UCI, caía uno de los grandes del ladrillo, la firma Reyal Urbis, el gigante que había surgido en 2007 de la fusión de Urbis y la constructora Reyal. Los intentos de refinanciación realizados en los años precedentes habían fracasado y ya era insostenible continuar adelante con una deuda de más de 4.600 millones de euros.  

De este modo, en febrero de 2013 presentó su solicitud de concurso y, un mes más tarde, el Juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid aceptó la petición. Fue una quiebra de récord pues fue la segunda más grande presentada tras la de otro gigante del ladrillo que también se vino abajo, la de Martín Fadesa. 

Cuatro años más tarde, el Juzgado de lo Mercantil ordenó el inicio de la fase de liquidación de una sociedad que no solo tuvo grandes vínculos con Jerez, sino que aún cuenta con varios activos que aún hoy trata de desprenderse. No en vano, desde la sede que tenía en la avenida Álvaro Domecq se coordinaba todo el negocio que tenía en Andalucía y en ella se fundó una de las sociedades que, con el tiempo, acabaron creando Reyal Urbis.  

No obstante, en septiembre del año pasado una promotora jerezana adquirió una de las principales propietarias que tenía en Jerez, unos solares situados entre las calles Circo y Santo Domingo, junto al Parque Williams. Con casi 12.000 metros cuadrados, en ellos podrán construirse hasta un máximo de 300 viviendas. La primera fase del proyecto residencial diseñado por el nuevo promotor, la firma Iniciativas Inmobiliarias, ya está en fase de comercialización. 

Ahora bien, aún se busca propietario para otras bolsas de suelo ubicadas en distintos puntos de la ciudad. Así, Reyal Urbis tiene en el mercado su parte de la Viña el Telégrafo y cuenta con suelos residenciales tanto en Los Villares como en la Ronda Este. 

Una parcela de 10.000 metros frente a Montealto

Parcela de Los Villares, junto a la antigua travesía de la N-IV.

A pie de la antigua travesía de la N-IV, una de las pocas parcelas que aún quedan por desarrollar en la zona residencial de Los Villares, tiene también puesto el cartel de 'se vende' por parte de la liquidadora de Reyal Urbis. La finca, ubicada entre las calles Mar Cantábrico y Mar Blanco, tiene una superficie de unos 10.3000 metros cuadrados.

Según el planeamiento urbanístico, en estos suelos, que tienen una superficie estimada de unos 6.300 metros cuadrados, se pueden construir edificios de viviendas de hasta tres plantas de altura. Piden por ellos unos 1,6 millones de euros. 

Parte de la Viña El Telégrafo

Entrada a la Viña El Telégrafo

Reyal Urbis tenía entre sus activos en Jerez buena parte de la propiedad de la Viña El Telégrafo, una explotación agrícola ubicada al inicio de la Carretera de La Morabita, en el paraje de El Carrascal. Ahora, el Juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid ha ordenado su subasta que se está gestionando a través del Consejo General de Procuradores de España. 

Los terrenos a subasta, que estará abierta hasta finales del próximo mes, tienen una superficie de unos 300.000 metros cuadrados aproximadamente repartidos en varias fincas. La puja mínima es de 750.000 euros.  

Unos 17.000 metros en la avenida Rey Juan Carlos

Camino de acceso a la parcela propiedad de Urbis en Montealegre.

El proceso de liquidación del gigante del ladrillo también incluye una parcela de 17.000 metros cuadrados situada en Montealegre, junto a la avenida Rey Juan Carlos. 

Estos terrenos están catalogados como urbanizables en el vigente PGOU y tienen una edificabilidad estimada de unos 5.000 metros cuadrados destinados para viviendas. Por esta propiedad se pide un mínimo de 680.000 euros. 

También vende suelos en Rota 

Los conocidos como el solar de Ferris fueron adquiridos por Reyal Urbis, aunque su quiebra provocó que no pudiera desarrollarlos a pesar de que se aprobó tanto el proyecto de reparcelación como el de urbanización de estos suelos.  

Es una parcela de más de 6.300 metros cuadrados ubicados en la avenida de San Fernando por los que se pide una oferta mínima de 4,9 millones de euros. Estas fincas tienen una edificabilidad residencial asignada de unos 14.800 metros cuadrados aproximadamente.