Mejorar la calidad de vida de las personas con trastorno del espectro autista (TEA) y sus familiares, de tal forma que disfruten de una inclusión en la sociedad y alcancen un estatus de ciudadanos de pleno derecho. Esto es lo que persigue la Asociación Autismo Cádiz y para conseguir este objetivo, la entidad considera que "es necesaria la especificidad en la atención en el autismo" desde los primeros años de vida.

Así, la asociación Autismo Cádiz ofrece un servicio de atención temprana específico para niños con TEA, siendo el único centro concertado de estas características en la provincia y uno de los tres que existen en Andalucía, junto con Huelva y Sevilla.

La entidad ofrece servicios para la infancia y la adolescencia en sus cuatro sedes de la provincia (Cádiz, Puerto Real, Jerez y Algeciras), pero sólo tiene concertada la atención temprana en Puerto Real y Jerez, con 26 plazas en total, donde los menores son atendidos por siete profesionales entre psicólogos y logopedas.

Según afirma la psicóloga Beatriz Mota Cepero, directora del Centro de Atención Infantil Temprana (CAIT) TEAtreves de Puerto Real y Jerez, se denomina atención temprana a la atención en los primeros seis años de vida de forma integral, teniendo en cuenta al niño, a la familia y al entorno. En concreto, la atención temprana en el autismo, "a diferencia de los demás, hace hincapié en las áreas que están alteradas por ese trastorno: la interacción social, la comunicación y la flexibilidad y anticipación; con una metodología de atención diferente y específica para las características de estos niños". Explica que para ello, se parte de la forma de percibir el mundo que tienen estos menores para adaptarla a sus necesidades, "esto hace que mejore la calidad de vida de los niños y de sus familiares".

La asociación Autismo Cádiz cuenta con el concierto de la Junta de Andalucía desde diciembre de 2017, pero lleva muchos años ofreciendo atención temprana de forma privada a través de subvenciones de la administración andaluza.

Beatriz Mota Cepero.

Beatriz Mota comenta que en 2014, se creó el acuerdo marco por el que se dejaron de dar subvenciones para concertar la atención temprana y que sea gratuita para todos los menores, pero Autismo Cádiz no se presentó porque se trataba de una atención generalista, de todas las discapacidades, y al considerar Autismo Cádiz la necesidad de la especificidad en la atención en el autismo, la junta directiva de la asociación decidió no presentarse a ese concurso.

Cuando en 2016 la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía reconoció la especificidad de la atención temprana y se mejoraron las condiciones de la atención (aumento del número de horas y del coste por hora), Autismo Cádiz se presentó a la convocatoria de ese año, "pero no nos asignaron horas porque concursamos en las mismas condiciones que los centros generalistas", señala Mota.

En diciembre de 2017, al haber una demanda de atención temprana mayor de la que podían cubrir los centros concertados, se sacó un concurso de urgencia y en ese momento fue cuando se concertaron las plazas en Autismo Cádiz, asignándoles 16 al centro de Puerto Real y 10 al de Jerez.

Consultar con el pediatra

Para que un niño pueda acceder a la atención temprana concertada que ofrece Autismo Cádiz, la familia tiene que consultar antes con su pediatra, y éste "si ve que hay necesidad, deriva al niño a la Unidad de Atención Infantil Temprana (UAIT) de la Delegación de Salud, que es un equipo de valoración formado por pediatras y psicólogos que hacen una primera valoración y determinan si hay idoneidad de derivación a un Centro de Atención Infantil Temprana (CAIT). Si en la valoración hay sospecha de TEA, ofrecen a la familia la opción de que el niño sea atendido en el centro específico, que en el caso de la provincia de Cádiz, el único concertado es el de Autismo Cádiz", manifiesta Beatriz Mota.

La directora del CAIT TEAtreves de Puerto Real y Jerez afirma que una vez que llegan las familias allí, se continúa con la valoración de los menores y se empieza con la intervención, según las necesidades que tenga cada niño. "Lo primero que se hace es la acogida de la familia en el CAIT por parte de las profesionales que los atienden y luego se empieza la intervención con el niño, que siempre se hace a través del juego y partiendo de sus intereses", precisa.

La asociación ofrece el servicio en horario de mañana y tarde, con sesiones de 45 minutos. Los niños acuden con diferente frecuencia, según sus necesidades, pero como mínimo todos van dos días a la semana.

Beatriz Mota aclara que cuando los niños llegan a la asociación, llegan solo con una sospecha de autismo, y durante el tiempo que están allí se hace un diagnóstico diferencial y se confirma o no la existencia del TEA, "porque hay casos que simplemente son un retraso en el desarrollo o un trastorno en el lenguaje", indica.

Destaca que una vez que se inicia la intervención con los pequeños, los profesionales se ponen en contacto con los centros educativos para coordinar la atención, los objetivos a trabajar y dar pautas.

A finales de este año 2019 hay previsión de un nuevo concurso y "Autismo Cádiz pide que se haga un concierto específico que tenga en cuenta la singularidad de la atención a menores con TEA", expresa la directora del CAIT.

La asociación también pide que se amplíe el tiempo de atención de los menores más allá de los seis años, porque el autismo "es una discapacidad que dura toda la vida y los niños siguen necesitando mucho apoyo que a partir de los seis años, las familias tienen que buscar de forma privada y no todas tienen recursos económicos para ello. Cuanto más tiempo estén atendidos, mayor calidad de vida tendrán", concluye Beatriz Mota.