Sin Jonjabar
Alfonso Salido
El tonto listo
En la edición del domingo 18 del pasado mayo, con ocasión referencial al trabajo discográfico, Cd, protagonizado por Javier Salmerón, en homenaje póstumo al poeta arcense Julio Mariscal Montes, titulado ‘De Noviembre a Julio’, quedó reflejada la primera de la vez tercera que da título a este espacio de hoy. La segunda cita informativa sobre el gran poeta apareció en estas páginas el 16 de junio, centrada en la convocatoria del Premio Julio Mariscal a la ‘Mejor Letra Nueva del Cante por Petenera’, como consta en las bases de la 58 edición del anual concurso, informando una vez más sobre el mismo; citábamos al cierre del referido texto que estábamos anhelantes por leer ‘Pueblo’, el libro póstumo del poeta, presentado hasta ahora en Paterna de Rivera y Arcos de la Frontera, a las puertas de hacerlo en Cádiz en julio y en Jerez en los venideros septiembre, día 25, en la Fundación Caballero Bonald y noviembre en el Ateneo, calle San Cristóbal, respectivamente.
Es precisamente de la vez tercera citada cuando el referido libro póstumo de Julio Mariscal Montes, ‘Pueblo’, ha llegado a nuestro poder gracias a la Asociación Cultural Impresiones, de Paterna de Rivera, responsable de su publicación como entusiasta colectivo humano además de con la individualidad de sus integrantes y las colaboraciones personales, entre otras la del poeta arcense Pedro Sevilla Gómez, prologuista, Manuel Sánchez Ortiz de Landaluce, responsable de la revisión y correcciones, Víctor Marín Solano y Andrés Carmona Blanco, fotógrafo y viñetista respectivamente, Pedro Gozalbes Alonso, diseñador y maquetista y Juan Francisco Sánchez Benítez, responsable de la edición. Todos los citados, además del público asistente a las presentaciones llevadas a cabo hasta el momento, como el que sin duda habrá de sumarse a las venideras, respaldan la producción de ‘Pueblo’, una obra en prosa poética de Julio Mariscal Montes, gracias a Herederos de J.M.M.
Sin duda los amables lectores de este espacio que hayan seguido hasta aquí se estarán preguntando sobre ‘Pueblo’, -no el pueblo, aunque lo es-, sencillamente ‘Pueblo’, un pueblo concreto en el que el poeta vivió y ejerció su profesión como maestro por espacio de diez años: Paterna de Rivera. Un ‘Pueblo’ dedicado a su gente, a sus calles que al tiempo retrata a otros pueblos de la Baja Andalucía de mediados del siglo XX. En el amplio y acertado prólogo de Pedro Sevilla, para ‘Pueblo’, se aportan datos que -sin su autorización; perdón, Pedro por tomarme esta libertad-, deseo transcribir para mejor comunicar algunos de los aspectos profesionales y personales sobre Julio Mariscal. Refiere el prologuista: “Desde muy pronto, Julio se incrustó en las entrañas del pueblo, -Paterna de Rivera como queda referido- a través de la revitalización del flamenco y la Semana Santa, así como su profesión de maestro en cuya escuela recibió una mañana las visitas -entre otras muchas- nada más y nada menos que de Gerardo Diego y Gloria Fuertes. Fernando Quiñones dejó Chiclana-Cádiz un día para subir a la montaña y compartir con Julio. En ‘Pueblo’ se canta la alta dignidad de un jornalero a medio comer, la desilusión de una soltera, entre rezos y latines, o la triste realidad de una muchacha -lenta en su entender-, preñada comunalmente por mozos del pueblo, pero todo con una piedad que lo ennoblece”.
‘Pueblo’ no es un libro voluminoso, más que libro podemos catalogarlo como opúsculo -60 páginas con prólogo incluido-, pero cada una de ellas está impregnada, como lo está toda su poesía -Corral de muertos, Pasan hombres oscuros, Poemas de ausencia, Quinta palabra, Tierra de secano, Tierra, Último día, Poemas a Soledad, Trébol de cuatro hojas-, como un gesto de amor, destaca el prologuista; pocos escritores han retratado con tanta piedad a sus semejantes, a los desheredados, a los seres dolientes.
Paterna es pueblo de brocal y caballo. Pueblo sin río, de galopes perdidos. Pueblo de bordón, de oscuros besos con el corrosivo de la esquina y la madrugada en vilo. Pueblo con Andalucía en la garganta. Así se expresó Julio Mariscal Montes, nacido en Arcos de la Frontera en 1922 y fallecido en Jerez en 1977. En Paterna vivió, impartió sus conocimientos como docente y creó parte de su obra, por espacio de diez años -1957 a 1967-. Un pueblo y un cante: “Adiós, Petenera mía: ¿Cuándo te veré pasar/con tu cántaro y tu risa/por esta calle Real?”.
Sirva esta reseña como agradecimiento a la Asociación y Editorial Impresiones, de Paterna de Rivera, por el acierto y el enamoramiento puestos a disposición de ‘Pueblo’, publicación póstuma de Julio Mariscal Montes “como devolución de agradecimiento a tanto cariño mostrado por el poeta arcense a esta humilde tierra de secanos, dejando a los lectores tan bellas imágenes en prosa poética”.
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