La templanza de la autora de 'Tiempo entre costuras'

EL pasado lunes fue elegido por Editorial Planeta para presentar, como primicia en España, el tercer libro de la autora de éxito María Dueñas, 'La Templanza'. Título que podría evocar, aparte de una preciada virtud, el precioso nombre para una gran nave bodeguera - como lo hace 'La Constancia'-, mas en este caso hace en referencia a una viña -que tampoco es mal carro, que diríamos los castizos -. Y es que la escritora quedó prendada, una tarde de levante en calma, del encanto de un caserío, precedido por veintiocho aranzadas de Pedro Ximénez y con un jardín trasero, donde otrora estuviere su palenque de uva de postre para los habitantes del lugar.

Mas, lo importante es saber que este proyecto de bestseller, que tiene antecedente en 2009 con 'Tiempo entre costuras' (traducido a 25 idiomas) y llevado a una popularísima serie televisiva, tiene una tirada inicial de 500.000 ejemplares, para todo lo que abarca el mundo editorial de habla española. Y si cada periódico lo leen al menos tres personas, un libro de fortuna lo han de leer al menos dos, por lo que a un millón de hispano-parlantes nos va a cautivar la pluma sutil y el idioma fresco de Dueñas. En la historia de un indiano y bodeguero - que hizo su fortuna en América, como Barbadillo o Pemartín- y la consolidó en Jerez con sus vinos.

Un grupo, elegido por ella, de historiadores portuenses y autoras jerezanas tuvimos la oportunidad de ser contactados en su tercera o cuarta visita a la zona del jerez, ya que sus primeras investigaciones fueron de incógnito. Y así confrontó, de primera mano, todas las sensaciones e información acumulada sobre el Marco que había destinado para su tercera y preciosa historia novelada. Su segundo libro de 2012 había sido 'Misión Olvido', sobre la universidad californiana y las misiones españolas. Una intriga amorosa en el campus norteamericano, que ella frecuentó. No en vano, María es una profesora titular de la Universidad de Murcia, de cincuenta años y madre de dos hijos y feliz esposa. Con ello quiero facilitar unos datos personales que no aparecen siempre en su interesante currículo, pero que muestran que ella es una persona de apariencia frágil y gran fortaleza, de sensibilidad y experiencia que sabe de lo que escribe.

Fíjense que para casa grande de una de las protagonistas de la nueva novela, a la que llama Soledad, se inspira en la bonita casa, de estilo Fernando VII, que hay en la plaza de la Asunción y hace esquina bajando para el Arroyo. Una casa señorial bodeguera, típicamente jerezana, a cuyo largo balcón, 'empetao' el Jueves Santo, han vuelto en más de una ocasión el paso de palio de su patrona La Soledad… Lo demás que deseen saber se lo desvelará este extenso libro, del que lo único que nos agrada menos es la portada, carente de la fuerza que es necesaria para ejercer la templanza y más propio de una novela rosa, que de este libro de garra.