Siete décadas implorando al cielo
Reportaje
La hermandad cumple 70 años desde su erección canónica y la bendición de la imagen titular
LA hermandad de Santo Domingo tiene más que celebrar el presente 2013 que el Año de la Fe. Se cumplen exactamente 70 años desde su erección canónica como hermandad y de la bendición de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto. Siete décadas rogando al cielo desde el céntrico templo dominico que no ha dejado pasar la ocasión para celebrar la fecha.
El origen histórico de la cofradía, según algunos apuntes, puede datar nada menos que del siglo XVI, cuando un grupo de tintoreros genoveses fundaron una asociación primitiva bajo el nombre ‘Dulce Nombre de Jesús’. Sus primeras reglas fueron aprobadas el 31 de julio de 1555 por el Arzobispo Valdés, según constan en la célebre carta del licenciado Felipe de Haro, en julio del año 1604. Aunque hay constancia que la cofradía procesionaba con María Santísima de la Confortación durante el siglo XIX hasta 1868, cuando se cierra el convento de Santo Domingo.
No fue hasta después de la Semana Santa de 1941 cuando un grupo de cofrades comienza la reorganización de la primitiva hermandad del Dulce Nombre, añadiéndole el momento pasionista de la Oración en el Huerto. Justo tres años después, el cardenal arzobispo de Sevilla, Segura y Sáenz aprobó sus reglas. En el mismo 1943, la recién estrenada hermandad encarga la talla de Nuestro Padre Jesús y el Ángel Confortador al escultor gaditano Juan Luis Vasallo Parodi. Un año más tarde, en 1944, el conjunto escultórico salió triunfante desde Santo Domingo. La talla de Jesús fue restaurada en dos ocasiones, siendo la primera en 1994 junto al ángel y la segunda el pasado 2010.
La angustia de la talla de Jesús Orando en el Huerto es patente, muestra es el detalle de sudor de sangre que recorre la arrugada frente de la imagen, cuadro que enmarca la mirada de plegaria que lanza al cielo. Las musculosas manos agarran fuertemente el cáliz, símbolo de la pasión y de la sangre que iba a derramar. A su espalda, el Ángel Confortador con grandes alas acaba de pisar la tierra para calmar al Hijo.
El marco pasional lo cierra el siempre presente olivo, figura presente en este rezo de Jesús. La canastilla es obra de un recurrente Manuel Guzmán Bejarano que terminó el conjunto tal y como se conoce hoy día durante la década de los años 70. María Santísima de la Confortación saldría flamante en su paso de palio dos años de la constitución como hermandad, en 1945, acompañada de otro Ángel Confortador.
La imagen más antigua que conserva la hermandad de la talla de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto es un cuadro firmado por el artista con la obra recién terminada, que la cofradía luce con orgullo en su Casa de Hermandad.
El acto más especial que conmemora estos 70 años fue la dedicación del tradicional via crucis por dentro de los claustros de Santo Domingo, que tuvo lugar la pasada noche del Viernes de Dolores.
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