El juez de Vigilancia Penitenciaria de La Coruña que dio un permiso  de cuatro días al abogado recluso Emilio Rodríguez Menéndez, y que éste  aprovechó para fugarse, explicaba en su auto que este reo no se iba a  escapar por su "arraigo" en España, tanto en el plano familiar como  profesional. Ahora el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) está  estudiando si el magistradio pudo incurrir en alguna falta disciplinaria.

A pesar de que la Junta de Tratamiento le advirtió la posibilidad de  que Rodríguez Menéndez no regresara a la prisión de Teixeiro, donde  cumple una condena de nueve años y medio por un delito fiscal y otro  contra la intimidad, el juez Javier San Claudio consideró que podía  disfrutar de unos días teniendo en cuenta que en abril de 2009 cumple la  mitad de la condena y que mantiene un "buen" comportamiento penitenciario  y una "correcta" participación en actividades programadas.

Asimismo, entendió que debía estimar el recurso del recluso contra la  decisión de la Junta de Tratamiento de denegarle el permiso al tener éste  "apoyo y vinculación familiar" en el exterior, incluso habiendo firmado  su esposa el acogimiento.

En el plano psicológico, el magistrado considera que Rodríguez  Menéndez ha asumido el delito cometido, con "adecuada asunción de  responsabilidades y no hace atribuciones externas que minimicen su  responsabilidad personal".

Todo esto, para el juez, que firmó el permiso el 5 de agosto, le  proporcionó la "confianza necesaria" para que disfrutara de cuatro días,  y "desvirtúa" las razones esgrimidas por la Junta de Tratamiento.

A su juicio, no existe riesgo de quebrantamiento de la medida, y no  regresar a prisión, porque, según la Junta, el riesgo de fuga era de un  50 por ciento, y eso, para San Claudio, era un porcentaje "no muy  elevado". A esto, se le añade su "arraigo en España" y que ha cumplido  buena parte de la medida, "reduce el riesgo de quebrantamiento". 

Incluso, el juez recoge su conomiento de que Rodríguez Menéndez se  dio a la fuga a la hora de tener que ingresar en prisión para cumplir la  condena, marchándose a Argentina y Lisboa hasta que fue detenido en  Salamanca. Sin embargo, el magistrado entiende que el letrado volvió a  España "de forma voluntaria" y por eso no hay que tenerlo en cuenta.