Toros

Las jornadas abordan la historia de Miura y el sexto sentido de sus toros

  • El periodista Emilio Trigo modera la tercera sesión, protagonizada por Eduardo Miura

El mundo de las ganaderías tomó ayer el protagonismo en la 30ª edición de las Jornadas de Tauromaquia Ciudad de Algeciras. El edificio Pérez Villalta volvió a reunir a aficionados y profesionales del toreo para disfrutar del talante de maestros como Eduardo Miura, ganadero que acudió sin su hermano Antonio, además de contar con la ausencia disculpada del matador de toros Eduardo Dávila Miura. Esta tercera jornada estuvo guiada y moderada por el periodista Emilio Trigo.

Precisamente fue el profesional comunicador el que rompió el hielo marcando con detalle la historia de la familia, a lo que le acompañó un vídeo de cinco minutos donde el público pudo ver ante sus ojos las propias faenas en el campo. Trigo arrancó la historia en Juan Miura, quién compró 220 vacas en 1842. Fue sumando reses y fechas a la dilatada historia de la ganadería, desde por ejemplo la adquisición de dos sementales en 1854. En los años cuarenta del siglo pasado, dando un salto en este legendaria familia, José Miura lo cedió a Eduardo Miura Fernández, que con 27 años se hizo cargo. Continuó Trigo hasta el fallecimiento en 1996 del padre del invitado.

Una vez empezó a acercarse al micrófono el ganadero, se configuró un diálogo con el periodista en el que no dejó de participar el público. Un espontáneo incluso llegó a darle las gracias por participar en las jornadas por "darle categoría a este bendito pueblo".

El ganadero fue girando la conversación según las preguntas dejando detalles como el agradecimiento por la confianza que les dan en Sevilla al llevar 50 años lidiando el domingo de Feria, incluso recordó que su padre debutó un jueves en este festejo taurino. Hizo además referencia a los cambios actuales, "hoy hay toreros y toreristas", discrepando entre otras cosas que se diga que hay matadores que solo pueden torear cierto tipo de toros.

Convirtió en una simple anécdota sin florituras los símbolos identificativos de su ganadería, apuntando que después de 170 años mantienen la tradición. Sobre su familia sostuvo que han ido marcando un camino, el cual se ha venido siguiendo. Una política ganadera semejante a la de su padre, aunque con matices ya que la evolución forma parte del paso del tiempo.

Se adentró Trigo en su ganado, en la personalidad que tienen y destacó ese sexto sentido del que hablan de los toros de Miura, a lo que el ganadero respondió que "los toros de Miura memoria tienen". Reconoció que no le preocupa quién será el próximo que mate seis miuras (ocho toreros lo han logrado hasta ahora) y desveló que no suele ir a las corridas porque pasa un mal rato, "ojos que no ven, corazón que no siente". Incluso consideró que no han tenido nunca un animal merecedor de un indulto, solo recordando un caso en Valencia que se pidió pero no estaba entonces normalizado.

Hoy a las 20:30 horas continúan las jornadas con Juan Serrano, Finito de Córdoba, moderado por el periodista José Manuel Laza y la actuación del músico algecireño José Carlos Gómez.

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