Cuco y Valverde, enemigos íntimos
Navarro y extremeño, amigos desde que coincidieron en el Athletic en la década de los 90, se reencontrarán en Chapín
El próximo domingo en Chapín se verán las caras dos amigos en apuros. José Ángel Ziganda, entrenador del Xerez, y Ernesto Valverde, técnico del Villarreal, se conocieron cuando ambos jugaban en el Athletic de Bilbao y desde entonces mantienen una buena amistad. El cacereño llegó al cuadro rojiblanco un año antes que el navarro y le hizo de perfecto anfitrión. Txingurri defendió la camiseta de los leones desde la temporada 90/91 hasta la 95/96 y Ziganda desde la 91/92 hasta la 97/98.
Entonces, separaron sus caminos como futbolistas y ahora se vuelven a encontrar en un partido que ambos están obligados a ganar.
Los dos miraron el calendario cuando se realizó el sorteo y hablaron del encuentro pero seguro que ninguno de los dos llegó a imaginar que tendrían que afrontar el choque en una situación tan delicada.
El Villarreal es una de las sorpresas negativas de la competición, ya que en las últimas campañas, de la mano de Pellegrini, el equipo siempre luchó por lo máximo y ahora mismo en penúltimo, con sólo tres puntos, fruto de tres empates.
Valverde y Ziganda formaron una pareja de ataque que todavía muchos recuerdan en Bilbao por las jornadas de gloria que llevaron a San Mamés. El extremeño logró 58 goles en 188 encuentros y el navarro fue en su día uno de los fichajes más sonados de la entidad rojiblanca, que pagó por él a Osasuna 150 millones de las antiguas pesetas.
Cuco confía ciegamente en Valverde y da por hecho que al final de Liga el equipo de su amigo estará en el lugar en el que le corresponde, en la parte alta de la clasificación. "Tirarán para adelante, fijo, tienen buen equipo y buen entrenador. El fútbol suele tener estas cosas a veces".
De su etapa como jugador recuerda que "hemos tenido experiencias impresionantes, he metido cantidad de goles a pases de él y nos une una gran amistad".
De todos modos, el máximo responsable técnico xerecista tiene claro que "el domingo no habrá amistad de que valga, nos jugamos algo más que tres puntos los dos y es lo duro que tiene esta profesión, que a veces tienes que fastidiar a tu mejor amigo. Al final, esto es deporte, es alta competición y tienes que elegir, o tú o él. Ahí sí que no vamos a tener dudas ninguno de los dos".
Valverde vive una situación mucho más incómoda que Ziganda porque su equipo está configurado para estar arriba :: "Tengo finales cada fin de semana, y el partido ante el Xerez no es una excepción. Cuando pierdes siempre quieres tener rápido un partido para resarcirte, pero no es el caso y ahora tenemos quince días para pensar en qué estamos fallando y solucionarlo. Soy consciente de que estamos ante la necesidad de lograr un buen resultado".
De todos modos, sabe que su gran amigo le puede dejar muy 'tocado'. "La situación es complicada y sirve para ponernos un poco a prueba a todos. Está claro que siempre te transmite tranquilidad contar con el respaldo del presidente pero estoy aquí para conseguir resultados y para que el buen juego que hacemos obtenga la recompensa de los goles".
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