"Ganar, ganar y ganar" es la consigna del vestuario

El Xerez prepara su encuentro del domingo, a partir de las doce, en el Marcos Monge frente al Recreativo Portuense como si de una final se tratase. Tras el duro revés encajado en Chipiona, los azulinos se han conjurado y sólo piensan en ganar para intentar cerrar cuanto antes un ascenso a División de Honor que les está costando muchísimo conseguir.

La pasada semana ante el cuadro de Torres, Antonio Bonilla fue baja en el lateral izquierdo por motivos laborales y el equipo lo acusó bastante. Para el domingo, será alta y Vicente Vargas respira mucho más tranquilo, sobre todo si se tiene en cuenta que no va a poder contar con el también lateral derecho Rodri, que se pierde la cita por sanción.

Bonilla confiesa que "lo pasé bastante por no poder jugar. El míster me llamó un par de veces pero no podía dejar el trabajo, que no sobra. Esta semana sí que he entrenado y todos vamos a hacer un esfuerzo porque los días son complicados, todo el mundo sabe que con las motos sale mucho trabajo y no es cuestión de desaprovecharlo".

En Chipiona, el equipo le echó de menos y detalla que "los compañeros me lo han comentado. Fue un partido en el que no nos salió nada. Empezamos bien, por lo que se ha comentado en el vestuario, pero luego encajamos tres goles iguales. Hay que pasar página y estar centrados ya en el partido del domingo, que lo afrontamos como una final. Sólo pensamos en ganar, ganar y ganar. Hemos remado mucho durante toda la temporada como para ahogarnos en la orilla. El equipo ha sufrido mucho y se merece el ascenso. Toca ganar y esperar que el Rota, que lucha por ser segundo, también le gane al Isla Cristina".

En cuanto al partido ante el Recreativo Portuense cree que "va a ser complicadísimo, como todos. Todos los equipos de la categoría quieren ganar al Xerez y salen motivadísimos. Ellos han perdido opciones de ascenso pero querrán ganar y no nos van a regalar nada. Además, en la primera vuelta ya demostraron que tienen un buen equipo, con gente joven que juega bien al fútbol. Tendremos que estar muy centrados y no cometer errores para poder sumar los tres puntos. Seguros atrás y acertados arriba, esas son las consignas. Hay que ser solidarios y trabajar como bloque. Durante todo el año hemos destacado por eso, por correr, correr y apoyar al compañero que no llegue dentro".

El Xerez siempre ha estado en puesto de ascenso desde que comenzó la temporada y "ahora no podemos fallar. Nosotros tenemos que dejar al equipo en División de Honor y luego que pase lo que tenga pasar. Todos estamos muy ilusionados. Hicimos una gran primera vuelta y para nosotros se queda. En la segunda, comenzaron a llegar los problemas y por eso dimos el bajón. Hay que tener en cuenta que hemos jugado hasta en cuatro campos diferentes como locales y eso se nota. Empezamos en Chapín y todo iba fenomenal, luego tuvimos que irnos a La Juventud, jugar en Guadalcacín por el tema de la resiembra y luego, en La Canaleja cuando se cayó la valla de La Juventud el día del Cádiz B. Jugábamos de locales pero andábamos locos. Luego, también hemos tenido mala suerte con las lesiones y hay gente que se ha tenido que marchar por problemas laborales y no pudimos fichar. Como he comentado antes, después de tanta adversidad, merecemos subir".

Bonilla siempre ha jugado en posiciones mucho más adelantadas pero esta temporada aún no ha visto puerta. En ese sentido, bromea: "Ya sólo faltaba después de todo el año esperando hacer un gol que lo hiciera en El Puerto y sirviera para ascender... Ya en serio, lo importante para nosotros es ganar y da igual el compañero que lo haga. Lo celebraremos a lo grande porque nuestro éxito está en el grupo".