Los dirigentes de las ocho diputaciones andaluzas, seis gobernadas por el PSOE y dos por el PP, han apoyado una resolución política contra la supresión de estas instituciones por los "servicios esenciales" que prestan a las pequeñas poblaciones y han apostado por su renovación y modernización. En una reunión en Sevilla, han consensuado una resolución que han aprobado después en la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) en la que señalan que están a favor de la modernización, transformación y mejora de las diputaciones, pero defienden que "en ningún caso hay que suprimirlas".

El presidente de la FAMP y de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, ha dicho a los periodistas que estas instituciones "son el esternón de las políticas" que se llevan a cabo en los pueblos, principalmente en los de menos de 20.000 habitantes, y ha explicado que si se suprimieran "habría que inventarse una estructura parecida". Rodríguez Villalobos ha defendido la prestación de servicios a los pueblos más pequeños como la recogida de residuos sólidos urbanos, los bomberos o la calidad en el ciclo del agua, que cree que si no fuera por un ente supramunicipal "sería materialmente imposible" de llevar a cabo.

En la reunión han estado presentes, además de Villalobos (PSOE), los presidentes de las diputaciones de Córdoba, Antonio Ruiz (PSOE); Granada, José Entrena (PSOE); Huelva, Ignacio Caraballo (PSOE); y Jaén, Francisco Reyes (PSOE); así como los vicepresidentes de la de Málaga, Francisco Salado (PP); de Almería, Javier Aureliano (PP); y de Cádiz, Juan Carlos Ruiz (PSOE).

En la resolución, los representantes de las Diputaciones andaluzas se han mostrado, unánimemente, en contra de la supresión de este organismo ya que "las diputaciones provinciales son las garantes de la autonomía local, de la cohesión social, del mundo rural y del equilibrio interterritorial". Han denunciado las "falacias" de los argumentos de quienes pretenden eliminar las diputaciones y han asegurado que las entidades locales cumplen con el déficit y tienen superávit. Han manifestado que las diputaciones en España emplean a 62.000 personas, 9.000 de ellas en Andalucía. Además de la modernización de estas instituciones, los presidentes creen "imprescindible" una urgente revisión del marco competencial y de la financiación de las entidades locales.

En representación de las dos diputaciones presididas por el PP, el vicepresidente de la de Málaga, Francisco Salado, ha dicho a los periodistas que es "el momento" de que las diputaciones se defiendan contra el "ataque" y ha afirmado que "aquí no hay colores políticos" porque todos están convencidos de que son necesarias. Salado, que ha excusado la ausencia del presidente, Elías Bendodo, porque está en la feria de turismo de Berlín, ha manifestado que es "legítimo" que se quiera conformar un gobierno a nivel nacional, pero ha opinado que las iniciativas que afectan a la estructura del Estado hay que preguntárselas a los ciudadanos y a las personas afectadas. Ha asegurado que desde la FAMP seguirán defendiendo la importancia de las diputaciones y ha señalado que el presidente de esta federación, como "símbolo de municipalismo", será quien les represente.

Sin embargo, en un comunicado de prensa, el vicepresidente primero de la FAMP, el popular Joaquín Villanova, ha reprochado a Rodríguez Villalobos que "utilice" la entidad en los "líos internos" del PSOE, ante la propuesta de resolución sobre las Diputaciones. Villanova ha explicado que apoyarán siempre iniciativas que respalden "el papel de las Diputaciones como defensoras de los pequeños municipios y de la prestación de servicios", pero a pesar su voto favorable, ha denunciado "el intento de utilización de esta entidad en una cuestión que tiene más que ver con los líos internos de un partido político, en este caso del Partido Socialista, que con el interés en defender el futuro de las Diputaciones".