Receta

Pollo a la mostaza y miel con arroz blanco: jugoso y con todo el sabor

Pollo a la mostaza y miel con arroz blanco: jugoso y con todo el sabor

Pollo a la mostaza y miel con arroz blanco: jugoso y con todo el sabor

¡Amantes del pollo! Hoy traemos esta carne en una de sus mejores versiones: pollo a la mostaza y miel, además, acompañado de arroz blanco para completar este delicioso plato que te vamos a mostrar hoy Prepárate para enamorarte de la jugosidad del pollo y el irresistible equilibrio entre la dulzura de la miel y el toque picante de la mostaza.

Ingredientes:

  • 4 piezas de pollo (muslos o pechugas, según tu preferencia)
  • 3 cucharadas de mostaza dijon
  • 2 cucharadas de miel
  • 2 dientes de ajo
  • 1 cucharadita de pimentón dulce
  • 1/2 cucharadita de pimienta negra molida
  • Sal al gusto
  • Aceite de oliva virgen extra
  • 1 taza de arroz blanco
  • 2 tazas de agua o caldo de pollo

Elaboración:

  1. Lava bien las piezas de pollo y sécalas con papel de cocina. Luego, sazónalas con sal y pimienta al gusto. Puedes utilizar piezas con hueso para un mayor sabor, o deshuesadas para una preparación más rápida y sencilla.

  2. Ahora prepararemos la salsa. En un bol pequeño, combina las tres cucharadas de mostaza dijon con las dos cucharadas de miel. Agrega el pimentón dulce y la pimienta negra molida. Mezcla bien hasta obtener una salsa homogénea y reserva.

  3. Coloca las piezas de pollo en un recipiente lo suficientemente grande como para que queden bien cubiertas por la mezcla de miel y mostaza. Vierte la salsa sobre el pollo y asegúrate de cubrirlo por completo. Si tienes tiempo, déjalo marinar en la nevera durante al menos 30 minutos para que los sabores se impregnen en la carne.

  4. A continuación calienta un poco de aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto. Coloca las piezas de pollo marinadas en la sartén y cocina durante unos 6-8 minutos por cada lado, o hasta que estén doradas y bien cocidas. Durante la cocción, puedes añadir los dientes de ajo picados para realzar el sabor.

  5. Mientras el pollo se cocina, prepara el arroz blanco. Enjuaga el arroz bajo el grifo hasta que el agua salga clara. En una cacerola, calienta un poco de aceite de oliva y agrega el arroz para sofreírlo durante unos minutos para que se impregne del aceite.

  6. Añade dos tazas de agua o caldo de pollo al arroz y deja que rompa a hervir. Nada más que hierva, reduce el fuego a medio-bajo, tapa la cacerola y cocina el arroz durante aproximadamente 15-20 minutos, o hasta que esté tierno y haya absorbido todo el líquido.

  7. Sirve el pollo a la miel y mostaza acompañado del arroz blanco, que será el complemento perfecto para equilibrar los sabores agridulces del pollo. Puedes decorar el plato con unas hojas de perejil fresco.

Esta receta es perfecta para cocinar algo que no es difícil, pero que a la vez se siente elaborado en cada bocado. La combinación de sabores dulces y picantes (o más fuertes) siempre sorprende al paladar y es una combinación de sabores que raramente decepciona. ¡Disfruta de este plato y sorprende también a quien se lo hagas!

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