Brasil emuló a Argentina en su debut en la Copa América y, como la anfitriona, no pasó del empate ante una selección, Venezuela, con un potencial muy inferior. La selección de Menezes salió con brío y cierto ritmo, pero poco a poco fue perdiendo gas hasta el punto de que en la segunda parte, apenas dispuso de una ocasión clara ante la vinotinto.

Menezes pide a sus jugadores más ofensivos un esfuerzo para presionar y tratar de recuperar la pelota lo más arriba, para sorprender a un rival que, en la mayoría de los casos, se va a replegar sin remilgos.

Venezuela, por su parte, confió su suerte a los contragolpes lanzados por Arango, que jugó unos metros más retrasado de lo que solía hacerlo en el Mallorca. Arriba, el getafense Miku y el malaguista Rondón recibían el balón muy lejos de la portería brasileña, y en franca desventaja ante la zaga verdeamarelha.

Visto el guión, parecía cuestión de minutos que llegara el primer gol de Brasil, que percutió una y otra vez, huyó de las conducciones innecesarias y trató de combinar con pocos toques. Los laterales, Daniel y André Santos, trataron de desdoblarse, tirando paredes con Robinho por la derecha, Neymar con la izquierda y el enganche, Ganso, en zonas más interiores. Por detrás, Lucas Leiva mantenía más la posición con Ramires a su lado. Y en la punta de lanza, Pato.

Pero los venezolanos se pertrecharon bien atrás, cerraron los pasillos cuando Neymar, Robinho o Ganso ensayaron el último pase y no concedieron una ocasión clara hasta el minuto 27: Daniel penetró y pasó la pelota al corazón del área, Pato controló y estrelló con violencia su disparo en el larguero. Algo faltaba a Brasil: precisión en el pase de Ramires, más presencia de Ganso entre líneas y desborde claro por parte de Robinho y Neymar.

En una contra en el minuto 38, Robinho remató por bajo con el portero ya superado y el central Vizcarrondo salvó el gol con el hombro, tirado en el suelo.

Tras el descanso, el bloqueo de Brasil en los tres cuartos de campo era una evidencia. Venezuela empezó a discutirle la posesión de la pelota, Arango apareció más y empezó a tirar centros desde la izquierda.

Las entradas de Fred, Elano y Lucas Moura no sacaron a Brasil de su estado de confusión. Los favoritos empiezan bajo una manifiesta vulgaridad.