Finalmente, el jerezano Juan Rosillo jugará en el Conil que entrena Jesús Casas. El delantero, tras abandonar el Xerez, se había comprometido con la Unión Balompédica Lebrijana, pero ha recibido con agrado la propuesta del club conileño para jugar en Tercera División y no se lo ha pensado dos veces a la hora de cambiar de aires.

El futbolista celebra que el club sevillano haya respetado el acuerdo al que llegaron en el momento del fichaje para dar el salto de Primera Andaluza a Tercera: "Recibí una llamada el lunes, habían cambiado de entrenador y me dijeron que estaban interesados. Estaba en la Lebrijana con la condición de que si venía un equipo de superior categoría no me pusieran problemas para irme y así ha sido. Me mejoraron la oferta para que me quedara, pero ahora pienso más en lo deportivo. He pasado un mes muy a gusto porque todo el mundo se ha portado muy bien conmigo. Les he dado las gracias porque ha sido un periodo muy positivo".

No será la primera ocasión en la que juegue en Tercera porque ya lo hizo vistiendo la camiseta del Xerez B, pero tiene ilusión por hacerlo en un equipo competitivo ahora que se siente con mayor experiencia: "El Conil es un equipo de Tercera, donde hay mucha igualdad, y que peleará como el resto para llegar lo más alto posible. El año pasado fue especial porque se salieron dos equipos, el Sanluqueño y el San Fernando, pero si estamos unidos podemos hacer un buen año. No me marco objetivos porque es pronto, pero veo mucha ilusión en el grupo. Conozco a bastantes jugadores de la plantilla y veo que hay un grupo competitivo".

Sobre su salida del Xerez señala que "no puedo tener palabras malas para el Xerez porque se lo debo todo, pero terminé contrato y me esperaba que hablaran conmigo para decirme, por lo menos, que no contaban conmigo. Viqueira me dijo que no sabía nada antes de irme, pero yo ya me lo olía y me estaba buscando cosas. En el Xerez me ha faltado debutar. Lo he intentado, pero otros compañeros lo harán porque se lo merecen".