Las autoridades sanitarias españolas han detectado en frontera una segunda partida de fresas marroquíes infectadas con hepatitis A que, en esta ocasión, tenía Polonia como destino y que llegó a viajar a este país. Según la información recogida por el Sistema de alerta rápida para alimentos y piensos (Rasff) de la UE, esta segunda notificación tuvo lugar el pasado viernes, los controles rutinarios en frontera que se desarrollan para la entrada de productos a territorio comunitario. El Ministerio de Sanidad especificó que el producto entró por el Puerto de Bilbao, y, tras su detección por el sistema de alerta, fue destruido, sin que llegara en ningún momento al consumidor.

Se trata de una partida de 2.000 kilos de fresas que eran transportadas en 400 cajas. Sanidad informa de que fue destruida en el país de destino, es decir, Polonia, lo que hace suponer que fue enviada antes de que se conocieran los resultados de los análisis.

Por el momento, la Comisión Europea sigue con esta alerta activa, por lo que podría haber más actualizaciones.

Sanidad explica que es habitual que se produzcan este tipo de situaciones, aunque en esta ocasión ha trascendido a la opinión pública. Para el Gobierno español, la detección de alimentos contaminados demuestra que “el sistema funciona”, ya que se retiran y destruyen antes de que llegue a manos de los consumidores.

La página web del Rasff ha publicado hasta 82 alertas desde el pasado 13 de marzo, y cinco de ellas afectan a productos españoles. Así, este mismo lunes se había detectado una alerta por pesticidas de origen español y con destino Francia; y el 15 de marzo se alertó de un lote de pimientos también con residuos procedentes de un pesticida que no está autorizado.

Las organizaciones agrarias piden más controles y prohibir las importaciones marroquíes

Las organizaciones agrarias siguen pidiendo más controles y reciprocidad para los productos importados. COAG Andalucía, en concreto, cuestiona la versión oficial y señala que fue el 7 de marzo cuando esta nueva partida de fresas entró en territorio español. “Se tomaron las muestras y se liberó posteriormente la mercancía sin esperar los resultados de la analítica, que llegó a comercializarse y a consumirse, presumiblemente, en Polonia”

Según la organización eso demuestra una vez más “que el sistema no funciona, pues no evita los riesgos para los consumidores”, algo que es “vergonzoso e intolerable”. Por ello, exigió de nuevo la paralización inmediata de las importaciones de fresas y otros productos frescos de Marruecos, “ante la gravedad de las alertas en las mercancías de este país”.

La organización agraria Unió Llauradora i Ramadera, que fue la que hizo público este nievo caso, pidió a la Unión Europea que se tome “más en serio todo lo relacionado con la salud de los consumidores y establecer más controles”. Además, aprovechó para “pedir reciprocidad a los productos importados para el cumplimiento de las normas europeas”.