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El programa de aceleración Minerva, impulsado por Vodafone y la Junta de Andalucía, encara el ecuador de su sexta edición con un primer cribado de proyectos tecnológicos. De los 30 que iniciaron la formación en la segunda mitad del año pasado se ha pasado a 15 y después del verano serán las 10 que mejor desempeño hayan demostrado. Esta es la primera vez que Minerva utiliza este sistema, ya que en ediciones anteriores los 20 que comenzaban también terminaban. Además, esta vez el programa va a durar 15 meses, en vez de los nueve de otros años.
Ayer, dentro de su gira por todo el ecosistema innovador andaluz, el consejero de Economía, Rogelio Velasco visitó el espacio de coworking de Sevilla, donde trabajan siete de las 15 iniciativas elegidas. El resto se reparte entre Granada (tres), Málaga (dos), Huelva y Jaén. Velasco puso a Minerva como ejemplo de lo que hay que hacer en Andalucía. "Por mi ocupación anterior (es experto en innovación) he visitado muchos centros tanto en España como en Estados Unidos, y este proyecto no desmerece un ápice de los mejores que he visto en el mundo".
"Este proyecto no desmerece un ápice respecto a los mejores del mundo"
Lo cierto es que Minerva está en plena madurez: fue reconocida recientemente como primera aceleradora de empresas andaluza y cuarta de España en calidad de servicios según el ránking Funcas. Y de las 15 iniciativas en marcha, hasta 10 ya comercializan sus productos o están a punto de hacerlo.
Entre los proyectos están los siguientes:
Securekids: una app que permite a los padres gestionar móviles android por control remoto
Vestigia: asegura la trazabilidad de productos y servicios y evita falsificaciones.
Livelink: dispositivo antirrobo para motos.
Signaled: una solución que mejora la visibilidad de la señalización vertical de tráfico.
Sensacultivo: un dispositivo que permite conocer el estado de los cultivos.
Clover Biosoft: identifica la cepa causante de una infección en horas.
Kitcalm: facilita la comunicación con el dentista durante el tratamiento mediante un receptor inalámbrico.
Método Piecito: un método que corrige los defectos de los niños al caminar.
Yumego: una plataforma que une universitarios de diferentes ciudades para hacer viajes de fin de carrera.
Wavydrive: informa a los conductores sobre sus hábitos al volante.
Waniyanpi: vende 'snacks' para mascotas personalizados.
Bracelit: un sistema de gestión de eventos que controla el acceso con pulseras electrónicas.
Sporttia: gestión integral digital de un centro deportivo.
Dropshow: red profesional que pone en contacto a salas y bandas de música.
Esportter: solución de gestión para clubes deportivos no profesionales.
A modo de ejemplos, este periódico ha podido conocer algo más en profundidad algunos de estos proyectos.
Sensacultivo, liderado por Daniel Márquez, gira en torno a un aparato con forma de bate de beisbol, que en realidad recoge distintos sensores que sirven para conocer el estado de los cultivos. "Con una app, el agricultor puede ver cuándo y cuánto conviene regar, la necesidad de ventilación del invernadero, qué riesgo hay de que haya plagas y enfermedades", dice Márquez. Sensacultivo ya está realizando las primeras pruebas con clientes reales en la zona fresera de Huelva. A diferencia de otras ofertas de la competencia, no necesita de instalación y es portable, se puede llevar de un cultivo a otro sin problemas. Además, es "sencillo e intuitivo", lo que facilita el manejo al agricultor.
Método Piecito, liderada por la podóloga y psicóloga Elena Antón, ha ideado dos pequeños dispositivos que se adhieren a los pies de los niños y analizan la pisada. La información va a una 'app' que permite al podólogo saber qué hacer para corregir los problemas que pueda haber. "No utilizamos plantillas ni férulas, nuestra idea es mucho menos invasiva y molesta para el niño". Este producto se llama Gobyfoot y está previsto que se comercialice antes del verano. Después, Método Piecito lanzará ofertas similares para adultos y para deportistas, y en paralelo habrá formación para profesionales.
Waniyanpi, por último, hace algo muy original en un mercado en plena expansión, el de las mascotas. Concretamente, fabrica 'snacks' funcionales. Su responsable, Antonio Peralta, explica que este producto tiene una primera base de harina a la que se añade pescado, carne o fruta y, después, como si fuera una pizza, el cliente elige uno o varios ingredientes personalizados, dependiendo de lo que necesite su mascota. Por ejemplo, si tiene problemas en las articulaciones, puede elegir un 'snack' con mejillones de labio verde (procedentes de Nueva Zelanda), que contiene colágeno; o si tiene diabetes puede seleccionar uno de canela, ya que este ingrediente reduce el azúcar en sangre. De momento, Waniyanpi trabaja en la configuración de estos 'snacks' pero ya tiene una fábrica en Andújar lista para producir. Peralta teme, curiosamente, que el éxito sea tal que no lleguen a tener capacidad para absorber la demanda. Y si no han empezado es precisamente por eso, para asegurarse de que el lanzamiento se hace bien.
Los fundadores de Waniyanpi saltaron a la fama en su momento porque la tienda que tenían en Sevilla fabricaba pestiños o roscones de reyes para perros. Ahora quieren dar un paso más y llevar la revolución a través de la ventana digital al mundo culinario de las mascotas.
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