El avistamiento de cetáceos en aguas del Estrecho se ha consolidado como una de las principales demandas turísticas de Tarifa donde las cinco empresas náuticas que se dedican a esta actividad suman ya unos 50.000 clientes anuales, la mayor cifra de España tras las Islas Canarias.

Las aguas del Estrecho albergan una gran biodiversidad marina gracias a su gran profundidad a poca distancia de la costa que facilita el avistamiento de las especies más comunes de cetáceos como el delfín común o mular, pero también permiten la observación de ejemplares que se acercan menos al litoral y de gran tamaño, como el cachalote o el rorcual común, el segundo mayor cetáceo del mundo, que alcanza tallas máximas de hasta 26 metros.

Los empresarios del sector saben que los viajeros buscan cada vez más una actividad diferente para ocupar su tiempo libre y la zona del Estrecho permite ofrecer excursiones por el océano en cualquier época del año, por lo que se le considera uno de los mejores hábitats para realizar esta actividad.

André Anciaes, director comercial de Turmares Tarifa, una de las empresas que gestiona el avistamiento de cetáceos en esta zona del Estrecho, destacó en una entrevista que los estudios realizados evidencian que la mitad de los 50.000 turistas que anualmente se embarcan en Tarifa para disfrutar de esta experiencia declara que éste es el motivo principal por el que visitan esta localidad costera gaditana.

Las cinco empresas que explotan esta actividad desde el puerto de Tarifa mantienen una flota de ocho barcos que pueden trasladar a las aguas del Estrecho hasta un millar de turistas al día y cuya facturación anual supera ya el millón de euros.

El director general de gestión del Medio Natural de la Junta de Andalucía, Juan Madrid, destacó que el avistamiento de cetáceos en Tarifa representa un buen ejemplo de desarrollo sostenible pues "permite conservar el medio natural y a la vez desarrollar el territorio económicamente". Además, hay que destacar que este tipo de actividades contribuyen a romper la estacionalidad del flujo turístico, que no sólo en verano acuden a estas excursiones guiadas entre Europa y África.

Tanto Madrid como Anciaes coinciden en destacar el valor añadido que supone que muchas de estas empresas compaginen la observación de la fauna marina con el desarrollo de actividades científicas y de divulgación ambiental. "El avistamiento de cetáceos en Tarifa nos permite el desarrollo de una economía turística ligada al medio natural y también sensibilizar a la opinión pública de la biodiversidad que hay en nuestros mares", añadió el experto de la Junta.

Aunque el avistamiento de cetáceos se ha expandido en los últimos años en numerosos puntos del litoral español, es en Tarifa donde se ha concentrado la mayor demanda para esta actividad a excepción de las Islas Canarias, donde la tradicional actividad turística acumula un mayor número de pasajeros.

El Estrecho es paso de las migraciones de animales marinos y las autoridades de la zona llevan tiempo cuidando esta peculiaridad. La Consejería de Medio Ambiente realiza desde hace tres años censos aéreos y marítimos de cetáceos en aguas andaluzas en una iniciativa pionera en España. El seguimiento se hace por mar y por aire con diversos vuelos en avioneta que recorren las costas de las cinco provincias andaluzas con litoral aunque se concentran en la provincia de Almería y en aguas del Estrecho de Gibraltar. Estos censos permitieron identificar durante el año pasado "un elevado número de delfines como el delfín común, listado y mular, a los que se suman calderones e incluso algunas orcas, yubartas y también cachalotes", según fuentes de la Junta de Andalucía.