Jornada de audiencias ayer para la reina Letizia en el Palacio de la Zarzuela. Haciendo alarde de nuevo de su apoyo a las causas abanderadas por mujeres, la Reina se reunió primero con una representación de la Asociación Colectivo de Cultura Popular Alhama, que la informó sobre sus actividades, proyectos de futuro y su visión del día a día de la mujer en el ámbito rural. Más tarde, doña Letizia vio al equipo campeón de la XXXVIII edición de la Copa de Su Majestad la Reina de Balonmano, el Remudas Isla Gran Canaria. Para ambas citas, la soberana estrenó un top de estilo working girl, acompañados de pantalón sastre negro y stilettos también negros.

El top que lució ayer por primera vez llevaba un estampado print geométrico lo que, junto al pantalón negro, forman un estilismo estupendo de trabajo, aunque algo sobrio.

El atuendo, unido a que llevó la melena suelta y lisa sin ningún peinado original, era calificado ayer como algo "soso" por algunos medios, tras su aparición el miércoles durante el acto conmemorativo del 25 aniversario de la fundación del Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria, celebrado en Navarra, en el que sí logró deslumbrar.

Doña Letizia recuperó en esa ocasión uno de sus conjuntos favoritos: un dos piezas compuesto por camisa marsala, uno de los colores estrella de esta temporada, y falda de tubo blanca con motivos marsala y reminiscencias japonesas. Ese look, creado por Felipe Varela, su diseñador de cabecera, la ha acompañado en multitud de ocasiones y, aunque suele variar los complementos, se ha convertido en una apuesta segura de la Reina cuando quiere meterse en el bolsillo a los especialistas en estilismo. La de ayer quizás no fue una vestimenta llamativa para triunfar, pero sí es correcta para la ocasión.