Pocos minutos después de las ocho de la mañana de este jueves, un Boeing 737 de la compañía Tui aterrizó en el Aeropuerto de Jerez procedente de la ciudad alemana de Fráncfort dando así por inaugurada una nueva temporada de vuelos con Alemania. Unos 50 minutos después, lo hizo otra aeronave de la misma aerolínea que unas dos horas y media antes había partido de Düsseldorf.

De este modo, en esta jornada se retomaron las conexiones comerciales regulares desde aeródromos alemanes con la terminal jerezana, unos vuelos cruciales para la actividad turística en la provincia —los últimos vuelos se habían producido en el fin de semana de Reyes Magos a pesar de que hay vigente un acuerdo con el Patronato Provincial de Turismo, dependiente de la Diputación, para el mantenimiento de, al menos, una conexión semanal en invierno—. No en vano, en torno al 21% de los turistas que se alojaron en la provincia durante el pasado año tenía pasaporte germano. Mientras, los británicos supusieron en torno a un 10% del total de los que se alojaron en algún establecimiento de la provincia.

Un elevado porcentaje de alemanes, no cuantificado, llegó a la provincia gracias a estas conexiones aéreas, de ahí que haya una cierta correlación entre el volumen de pasajeros que mueven estos vuelos con el de viajeros hospedados (unos 249.000 pasajeros frente a aproximadamente 209.000). No en vano, el número de turistas que pasaron al menos una noche cayó en 2023 casi un 18% respecto a 2019. En este periodo, mientras tanto, el número de viajeros de las conexiones alemanas se redujo en un 36%, una de las causas que el aeródromo jerezano cerrara el pasado año con peores cifras respecto a 2022.

Pero, a pesar de que aún no se ha recuperado el número de visitantes que había antes de la pandemia, la provincia sigue siendo un destino al que recurre el cliente alemán. Lo demuestra que, a día de hoy, está entre los 15 aeropuertos de toda España que más pasajeros alemanes mueve, según las estadísticas del gestor aeroportuario Aena. Es más, según datos publicados por la Junta de Andalucía, un 89,5% de los alemanes que visitaron la comunidad autónoma durante el primer semestre del año pasado viajaron en avión. Aunque la mayoría lo hizo a través de Málaga (un 72% concretamente), un 11,4% lo hizo a través de las instalaciones jerezanas.

Claro está, la terminal jerezana está a años luz del principal destino de los germanos en España que no es otro que la isla de Mallorca —unos nueve millones de pasajeros contabilizó la terminal de la capital balear el año pasado—. Bien es cierto que en este mercado está a niveles de aeródromos más grandes como Sevilla (en 2018, Jerez llegó a superarle en número) o Girona-Costa Brava. Y supera ampliamente a otras terminales con más pasajeros, aunque turísticamente menos apetecibles para los alemanes como es el caso de los norteños de Santander, Asturias o Santiago.

Sin embargo, el aeródromo jerezano es uno de los que más pasajeros alemanes ha perdido porcentualmente respecto a los registros de antes de la pandemia y ha sido el único que recibió a menos viajeros respecto a 2022 (un 10,4% menos), a pesar de que el número de viajeros hospedados en la provincia aumentó. Bien es cierto que se ha producido un descenso generalizado del número de usuarios de los vuelos entre Alemania y España entre 2019 y 2023, pero la pérdida ha sido más acusada en la terminal jerezana, que tiene en este país su principal mercado internacional.

Eso sí, no se ha llegado a las caídas extremas como el aeropuerto de Granada-Jaén, Santander o Pamplona, que han perdido la práctica totalidad de las rutas comerciales con el país germano. Pero otras infraestructuras como las de Alicante, Sevilla, Bilbao o Menorca han tenido pérdidas de entre un 11 y un 23%, aunque todas ellas acabaron en positivo en la comparativa 2022-2023. En cambio, sí están con mejores cifras respecto a 2019 aeródromos como Málaga, Girona-Costa Brava o Valencia.

Por lo tanto, el inicio de la temporada con Alemania este 8 de febrero, una semana antes del año pasado, la previsión de una nueva ruta (con Leipzig) y la ampliación de una ya existente (Hamburgo) invita a ser optimista y a pensar que este 2024 arranca con posibilidades de mejorar los registros 2023. Ahora bien, alcanzar las cifras prepandemia se antoja complicado, más si cabe cuando aún no se han recuperado rutas con ciudades con Berlín o Colonia (con esta última hay programados algunos vuelos chárter en los próximos meses). Pero, cualquier pretensión de que el Aeropuerto de Jerez vuelva a superar el millón de viajeros, como hizo en 2017 y 2019, pasa por Alemania, sin lugar a dudas.