Institutos y colegios de la ciudad sufren temperaturas de 38 grados en las aulas

Al igual que ocurrió en junio de 2017, con una ola de calor que hizo insoportable la asistencia a clase en muchos centros educativos de la ciudad, las intensas temperaturas de este tramo final de septiembre está siendo especialmente duro para muchos colegios e institutos. En la mayoría de ellos, las aportaciones del Ampa han permitido la colocación de aparatos de aire acondicionado. Sin embargo, existen otros muchos centros que por una u otra razón no han podido asumir estos gastos y están sufriendo elevadas temperaturas en estos días.

Uno de ellos es el IES Vega del Guadalete, en La Barca de la Florida. Allí, el alumnado está dando clases con temperaturas que rozan los 38 grados, sobre todo en las clases de la segunda planta, donde el calor es más intenso. Si ya de por sí una clase con 32 o 33 alumnos genera temperaturas elevadas, si a ello le sumamos el calor de estos días, el resultado es, según han asegurado a este medio algunos padres, "algo insoportable".

En este centro, el Ampa está preparando ya un escrito a la delegación territorial de educación para pedir una solución al asunto, ya que, al contrario que en otros centros de la ciudad, no puede hacer frente a la inversión económica importante que se necesitaría para colocar aires.

Esta misma situación se está viviendo esta semana en otro centro de la ciudad como el IES Álvar Núñez. Allí, tampoco hay aire acondicionado y se da la misma circunstancia que en La Barca, es decir, clases con 35 alumnos y agobio total para aguantar las clases, sobre todo a medida que avanza la mañana.

Otro instituto que está sufriendo las altas temperaturas estos días es el IES La Campiña, en Guadalcacín. Allí, los actos vandálicos efectuados hace unos meses han dejado al centro, que sí tenía aire acondicionado en todas las aulas, sin refrigeración. A ello hay que unir las propias instalaciones del instituto, hechas con un material que se recalienta con el sol y también propicia que las temperaturas sean bastante elevadas en cada clase.

Tampoco se libra el IES Fernando Savater. En este instituto, hay aire en la segunda planta, pero no en la primera donde los alumnos denuncian un calor infernal, tanto que ayer uno de los alumnos sufrió una pequeña lipotimia. El profesorado, no obstante, se muestra comprensivo y permite a los estudiante salir a refrescarse en caso de necesidad.

Pero no sólo los institutos están padeciendo situaciones de este tipo. En algunos colegios de la ciudad el calor también está haciendo mella entre el alumnado.

En Guadalcacín, padres y madres del Tomasa Pinilla se quejan del intenso calor que sufren los pequeños en clase; algo que también se repite en otros como el San José Obrero. De hecho, en este colegio, el Ampa terminó ayer de dotar a 20 aulas de Infantil y Primaria con ventiladores que han adquirido con sus propios fondos para tratar de hacer más llevaderos estos días de asfixiante calor.

En la concertada, por contra, algunos centros han ampliado una semana más el plazo para utilizar el uniforme habitual.