Tonterías, las precisas

No se bien a quién se le debe esta frase. Pero se la escuché a un buen amigo cuando en una tertulia alguien se andaba por los cerros de Úbeda, no acababa de concretar su mensaje y además no se ajustaba a la verdad de los hechos. Pues se suceden los acontecimientos y esta sentencia viene al pelo. A más de uno hay que decirle esto de “oye, tonterías, las precisas, las justas”. Y pasemos a otros temas, que bastante lleno está el mercado de interpretaciones difíciles para entendederas normales.

Primero fueron las declaraciones de González Cabañas en el Diario, cuando dijo eso de que “es perfectamente normal que podamos pactar con Pedro Pacheco”. ¿Quién va a pactar con los pocos concejales que consiga don Pedro, Pilar Sánchez? Pilar estará pensando que por encima de su cadáver. No me quiero ni imaginar qué sería de la Alcaldía de Jerez si tras el 22 de mayo, doña Pilar vuelve a ser la alcaldesa aupada por los votos que consiguiera Pacheco. No lo veo de ninguna manera, a no ser que el capitán de los socialistas gaditanos ya tenga estudiada la fórmula para sustituir a doña Pilar y, a cambio, perpetuarse en la presidencia de la Diputación.

Otra tontería de estos días ha sido la presencia de Andalucía, de Cádiz o de Jerez en la ya célebre Fitur. Dicen que se han puesto algunos chiringuitos playeros a lo largo de La Castellana, en los que los madrileños podrán disfrutar del estilo, del ambiente y de la gastronomía de lo que son los chiringuitos de nuestra provincia. Cuando lo leí, me fui de cabeza al célebre paseo provisto de chanclas, bañador y toalla, por si algo me estaba perdiendo. Lo primero que supe entonces es que nadie se ha enterado de tan buena nueva y que en la terraza de un hotel había algo parecido a este tipo de establecimiento playero. Y por cercanía, en La Vaguada también busqué señas de nuestra identidad, y me fue bastante difícil ver un breve mostrador, que ponía “Andalucía”. Comprendo y entiendo que las arcas de la Junta no están en estos momentos para promociones, pero para hacerlas mal y a lo pobre, más vale muchas veces quedarse en casa.

No menos tontería ha sido la Torre de Babel en que se ha convertido el Senado. Ya habrán leído que, excepto en las demandas y preguntas al Gobierno, se pueden utilizar las varias lenguas del Estado español. O sea, que se da por bueno que cualquier senador puede utilizar el gallego, el catalán, el valenciano y el euskera para sus intervenciones o interpelar al resto de los senadores. Y el resto de ellos, con cascos en los oídos para enterarse de las majaderías habituales. Seguramente, es lo que manda el Estado de Derecho, pero ¿Habrase visto tontería de mayor magnitud? Ya lo dijo Suárez hace casi treinta años: “hay que hacer normal en la política lo que es normal a nivel de calle”. Pues no se enteran, lamentablemente, y venga a gastarnos dineros en traductores simultáneos, cuando sus ilustrísimas senadores son capaces de pedir en la barra del bar las comandas, acompañadas de algún taco en purísimo castellano. O se pondrán a discutir en los pasillos lo que no han sido capaces de trasmitir desde sus escaños.

No menos estupefacción me causa el leer que el señor Joaquín Bilbao va a volver a la presidencia del Xerez Deportivo. Con todos mis respetos, ¿no fue este señor el que se lió a tiros contra la fachada de un bar de alterne? ¿No hay en todo Jerez alguien representativo que pueda tomar el testigo del tal Morales? Supongo que los aficionados estarán deseando que “el nazareno” desaparezca cuanto antes, pero ¿para que venga hasta la presidencia de nuestro primer equipo un cowboy sin puntería?

De verdad, y como decía mi amigo, de tonterías, las precisas.